Las bolsas de Asia han cerrado la primera sesión de la semana en negativo, mientras los inversores están pendientes estos días de EEUU, donde se celebrará la reunión de la Fed y se publicarán los datos de inflación. Los mercados dan señala de se alejarse de los activos de alto riesgo antes de más noticias sobre política monetaria.
Así, el índice Hang Seng cayó un 2,58%, liderando las pérdidas en la región. El Nikkei 225 se dejó un 0,21%, el Topix perdió un 0,22%, el Kospi cerró con una caída del 0,67%, el Shanghái Composite bajó un 0,63% y el Shenzhen cajó un 0,478%. En Australia, el S&P/ASX 200 cerró con una caída del 0,45%.
De esta manera, las acciones chinas y de Hong Kong fueron las que más cayeron, dado que el mercado teme que la relajación de las medidas anti-COVID en China provoque tasas de infección mucho más altas. Además, esto compensó en gran medida el optimismo sobre una posible recuperación económica en el país.
Por otro lado, hay indicios de que el banco central de Taiwán anuncie otra subida leve de tipos de interés en los próximos días. Es probable que se eleve hasta el 1,75%. En la última reunión, celebrada en septiembre, el banco también los subió 12,5 puntos básicos, hasta el 1,625%.
