El mercado parece haber recibido de buen grado la decisión del líder opositor venezolano Juan Guaidó de proclamarse presidente interino de Venezuela. Tanto el de bonos como la bolsa. La deuda soberana venezolana está atrayendo a los inversores, que se han lanzado a comprar bonos ante la expectativa de la caída del régimen de Nicolás Maduro.
Este jueves el bono con vencimiento en septiembre de 2027 y un cupón del 9,25%, en situación de impago, se está moviendo intensamente. Este miércoles, tras el anuncio de Guaidó, registró su mayor subida en un año, y continua con los avances hasta el punto de cambiarse al 32,27% de su valor nominal, frente al 28,99% en el que cerró el pasado martes. Se trata, recoge El Confidencial, de un incremento del 11,3% del precio, que se mueve de forma inversa a la rentabilidad.
Este movimiento es un claro reflejo de que los inversores internacionales se están posicionando de forma clara ante las expectativas de que se produzca un cambio de gobierno en Venezuela, un país que atraviesa una complicada situación económica. De hecho, parece que el mercado cree que la llegada de Guaidó podría relajar las tensiones que mantiene Maduro con algunos países, e incluso podría permitir llegar a acuerdos de reestructuración de la deuda.
¿Y LA BOLSA?
Por su parte, el Índice de la Bolsa de Valores de Caracas (IBVC) registró este miércoles una fuerte subida del 3,17% hasta los 5.734 puntos, después de haber caído con fuerza en las sesiones previas (el lunes se dejó un 2,3% y el martes retrocedió un 2,5%).
No obstante, más llamativo que eso es la subida que ha registrado la bolsa venezolana en el mes de diciembre, que ha sido significativa. A mediados de ese mes estaba por debajo de los 1.000 puntos, y ahora se sitúa a las puertas de los 6.000. Su valor se ha multiplicado por más de cinco veces en apenas un mes.
Juan Guaido, líder de la Asamblea Nacional, se proclamó este miércoles presidente interino de Venezuela, aunque Maduro no tardó en salir a reivindicarse como único presidente. La tensión se mantiene en el país, con decenas de protestas, y la repercusión ha llegado a todos los puntos del planeta. Ya son muchos los países que han tomado partido por uno u otro.