El coronavirus ha dejado a las bolsas de todo el mundo en la UCI. Su llegada con fuerza a Italia y, por tanto, a Occidente, ha elevado la preocupación inversora que, a su vez, hundió a los parqués este lunes. Las caídas registradas fueron las peores desde el punto y final a los estímulos masivos de la Fed a la economía de EEUU en 2013.
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Lo dice David Ingles, uno de los gurús de Bloomberg. A través de su perfil de Twitter deja claro que "este lunes negro es una de las peores jornadas bursátiles de los últimos años".
Ingles toma como termómetro el MSCI All-Country Index, es decir, el selectivo que mide el desempeño de las bolsas mundiales. Y lo hace comparando los datos registrados desde 2010 a la época actual.
La sesión del lunes es la segunda menos buena de todas, solo por delante del 'Volmageddon' (o 'Armagedón de la Volatilidad', como fue acuñado por el portal Zerohedge), el día en el que el VIX (indicador de la volatilidad esperada en el S&P 500) se disparó a niveles no vistos en años.
Luego está la caída registrada en 2013 después de que la Fed anunciara que reduciría el ritmo de sus compras de bonos del Tesoro y, por tanto, la cantidad de dinero con la que estaba alimentando a la economía de EEUU. Muy cerca se encuentra la fuerte devaluación del yen japonés registrada en 2015 que también lastró a los mercados especialmente.
A continuación está el desplome que sobrevino al referéndum del Brexit en 2016 y, finalmente, la crisis del euro vivida en 2011. Este gráfico permite poner en perspectiva la sangría de las bolsas fruto de la incertidumbre creada por el coronavirus. En España, 1.000 personas han sido puestas en cuarentena tras el positivo de un turista italiano que visitaba Tenerife. A su vez, en Italia se acaba de confirmar un caso en Sicilia, el primero al sur del país trasalpino.
