- Sólo el 12% de gestores de hedge funds y capital riesgo se muestra pesimista, según un informe de la consultora Preqin
- Los mayores beneficios los encuentran en el recorte esperado de impuestos corporativos y en la inversión en infraestructuras
Los analistas se equivocaron dos veces con Donald Trump. La primera, por apostar por la victoria de Hillary Clinton. La segunda, por anticipar un desplome del mercado con un 'Triumph'. El susto duró en el mercado unas horas. De hecho, los gestores de inversión colectiva alternativa (hedge funds y capital riesgo) se frotan las manos: esperan mayoritariamente que la política de la próxima legislatura les beneficie.
Lejos queda el nerviosismo del mercado cuando el triunfo del magnate estaba a punto de confirmarse. A las 6:00 de la mañana, hora española, el Nikkei japonés se desplomaba un 6%, el oro se disparaba un 5%, y los futuros de los principales índices europeos y estadounidenses cotizaban con descensos de entre los cuatro y los cinco puntos porcentuales.
Pero no solo no hubo sangría, sino que muchos profesionales del mundo de la inversión aplaudieron la llegada de Trump a la Casa Blanca, que se hará efectiva el próximo 20 de enero. Así lo muestra un estudio de la consultora Preqin, especializada en ofrecer información sobre la industria, generalmente opaca, de hedge funds y fondos de capital riesgo. La firma ha realizado una encuesta entre 182 gestores de vehículos de inversión alternativa (57 hedge funds y 125 de capital privado), y entre ellos el 53% cree que la elección del candidato republicano será beneficiosa para el sector.
Por el contrario, sólo el 12% cree que será negativo. Las expectativas, por tanto, son de un escenario positivo para la industria en Estados Unidos. Sin embargo, hay dudas y división sobre los efectos para este tipo de instituciones de inversión colectiva en el extranjero. El 25% de los gestores considera que el nuevo escenario perjudicará a la industria que está fuera de Estados Unidos. En este caso, sólo el 22% espera un beneficio.
Las respuestas se basan en las expectativas de un presidente proclive a políticas “pro-negocios” que favorecerán a los segmentos de inversión
Las respuestas se basan en las expectativas de un presidente proclive a políticas “pro-negocios” que favorecerán a los segmentos de inversión, según explica Preqin a partir de las respuestas de los gestores. Es decir, esperan una menor presión regulatoria y de la opinión pública para desarrollar su negocio. Pese a los efectos positivos que elevan el optimismo de los 'managers' basados en Estados Unidos, sólo el 21% confirma una previsión de aumentar más su patrimonio a través de la captación de dinero, frente al 24% que proyecta menos entradas de capital.
Los hedge funds ya están en máximos históricos en volumen de activos bajo gestión. En octubre alcanzaron un patrimonio de 3,1 billones de dólares -en torno a 2,9 billones de euros-, con un 72% del dinero gestionado en Estados Unidos y con más de 5.000 gestores, según las estimaciones de Preqin. Las cifras están en línea con las publicadas el mes pasado por Hedge Fund Research (HFR): durante el tercer trimestre incrementaron los activos en 73.500 millones de dólares hasta finalizar septiembre con 2,97 billones.
Los profesionales de la industria, aun así, descartan de forma mayoritaria un impacto en su actividad durante los próximos cuatro años. Aunque el 18% sí reconoce que espera efectos en sus decisiones de localización del vehículo y un 13% en el tipo de inversores potenciales que pueden tomar posiciones en estos productos.
LOS GESTORES DESTRIPAN LAS PROMESAS DE TRUMP
La encuesta de Preqin también analiza las promesas electorales de Trump para los primeros 100 días de su mandato y para lo que se espera de él en la próxima legislatura. En este caso, de las respuestas se deducen luces y sombras en la visión de los hedge funds y en el impacto sobre la rentabilidad de sus inversiones.
El aspecto más beneficioso, según estos profesionales, es el recorte de impuestos para las empresas. La consultora pregunta a los gestores sobre el efecto que esperan en la industria de gestión alternativa de activos la bajada de un 15% en la presión fiscal a las corporaciones: el 73% asegura que habrá un impacto positivo, y sólo el 3% ve que será algo negativo.
La distribución de respuestas, aunque más moderada, va en la misma dirección con el gasto prometido en infraestructuras, con un programa de hasta un billón (millón de millones) durante los 10 próximos años. En este caso, las respuestas optimistas se sitúan en el 62%, por el 6% en sentido contrario.
El magnate articuló su campaña con el mensaje de “Primero América”, que a escala empresarial se traduce en incentivos para que las empresas repatrien los beneficios corporativos obtenidos fuera de Estados Unidos, lo que será positivo para la industria de hedge funds y capital riesgo, según el 57% de los gestores. El 11% opina lo contrario. Asimismo, también al menos la mitad de 'managers' (50%) aplaude la reforma planteada sobre la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés).
El sentimiento va empeorando con el resto de grandes promesas. El 49% se muestra favorable y el 12% en contra del levantamiento de restricciones a los proyectos de infraestructuras en energía. Los porcentajes cambian hasta el 27% con sesgo positivo y el 23% con sesgo negativo con el objetivo de Trump de redireccionar el programa contra el cambio climático.
Así, hay seis cuestiones del paquete previsto de políticas del excéntrico multimillonario que gusta a los gestores por considerar que afectará positivamente a su entorno. Sin embargo, preocupan otros tres planteamientos. Uno es el tratamiento fiscal de las ganancias de las instituciones de inversión colectiva, que serán tratadas como ingreso ordinario, algo en lo que coincidieron Clinton y Trump. Sólo el 11% cree que el mandato del empresario neoyorquino generará un impacto positivo en este sentido en la industria, por el 55% que anticipa que será perjudicial. Asimismo, el 54% y 59% respectivamente de las respuestas avisan de efectos negativos si cumple con su promesa de derribar el acuerdo comercial del Pacífico (TIP, por sus siglas en inglés), y si renegocia o tumba el NAFTA, que es el Tratado de Libre Comercio de América del Norte entre Estados Unidos, México y Canadá.
PRIMER GOLPE
Pese a la sensación en general positiva de los gestores, la primera semana de Donald Trump como presidente electo se ha traducido en un leve golpe para los hedge funds. Según el índice Lyxor Hedge Funds Index, su patrimonio se redujo un 0,3% en los siete días siguientes a las elecciones. En un informe, el proveedor francés de ETFs explica que el peor resultado fue para los vehículos especializados en renta fija, con una caída del 1,2%. En el año, entran así en terreno negativo y pierden una décima porcentual. Los centrados en futuros y commodities (CTA) se dejan un 0,9%, lo que ahonda las caídas en el acumulado de 2016 hasta el 5,8%.
Por su parte, la categoría de hedge funds de tendencias globales macro no registra cambios, y en el año se deja un 2,1%. Los de long-short, que invierten a la vez en posiciones largas y cortas en activos correlacionados, caen un 0,9% de media en la semana, y un 4,9% en el año.