La Justicia norteamericana dio ayer al traste con las pretensiones de la Comisión Europea de conseguir una cuantiosa indemnización de las tabaqueras Philip Morris y RJ Reynolds por su complicidad con el contrabando de tabaco, informa La Gaceta de los Negocios. El Tribunal de Justicia de Nueva York encargado del caso desestimó la denuncia presentada por el Ejecutivo comunitario por improcedente, argumentando que las arcas de la UE no se ven afectadas directamente por el tráfico ilegal de tabaco.

De esta forma, los jueces norteamericanos frenan la histórica decisión tomada por Bruselas hace un año de denunciar ante un tribunal extranjero a empresas extracomunitarias por su actuación indirecta en el viejo continente. Sin embargo, el Tribunal deja abierta la vía a que los estados miembros por sí solos interpongan una denuncia semejante, al ser los directamente afectados por el delito.