Japón ha caído en recesión de manera inesperada tras un débil PIB del cuarto trimestre. El crecimiento negativo anualizado del 0,4% contrasta con la subida prevista del 1,4% y se suma a la contracción del 3,3% registrada en el tercer trimestre.
Cuando una economía encadena dos trimestres de crecimiento negativo, se considera que está en recesión técnica. La contracción del PIB nipón ha hecho que el país pierda el tercer puesto entre las grandes economías mundiales y haya sido adelantado por Alemania.
El PIB provisional del cuarto trimestre se contrajo un 0,4%. Uno de los principales lastre fue la debilidad del consumo, que se redujo un 0,2% frente al tercer trimestre, cuando el mercado esperaba un repunte del 0,1%.
Estos datos hacen "que el camino de las subidas de tipos sea un poco más incierto. Probablemente, el Banco de Japón (BoJ) tomará una decisión en abril, después de conocer el resultado de las negociaciones salariales de Shunto", ha comentado Ayesha Tariq, experta de MacroVisor.
"Sin embargo, el BoJ ya ha insinuado que el aumento de tipos será muy gradual y que las condiciones seguirán siendo acomodaticias. Una recesión lo hace aún más plausible", ha añadido.
"Las acciones japonesas han cerrado al alza, ya que los operadores valoran la idea de que continúen las condiciones monetarias ultralaxas", ha concluido.
Por su parte, los expertos de Danske Bank han añadido que "la caída del PIB se debe principalmente a la debilidad del consumo y del gasto de capital. El dato complica las perspectivas de política monetaria del Banco de Japón, aunque éstas dependen en gran medida de las negociaciones salariales de primavera".
Desde Pantheon Macroeconomics, han indicado que "la recesión técnica acapara los titulares, pero enmascara las mejoras subyacentes observadas en la mayoría de los componentes del PIB, aunque sean marginales".
"Los resultados de las negociaciones salariales de primavera para las grandes empresas del 15 de marzo siguen siendo fundamentales para la decisión política del BoJ, y seguimos esperando que el organismo utilice eso como pretexto y elimine la política de tipos negativos en el segundo trimestre, a pesar de que los datos económicos y de inflación probablemente no justifiquen plenamente endurecer la política monetaria", han argumentado.
"Dicho esto, es probable que el BoJ mantenga su política acomodaticia después de poner fin a la política de tipos negativos, como destacó el vicegobernador Uchida en un discurso que pronunció la semana pasada", han concluido.