Los bancos vienen sufriendo en bolsa. El Stoxx 600 Banks ha caído cerca de un 10% desde la última reunión de la Reserva Federal (Fed) y, si bien es cierto que el saldo en lo que va de año es claramente positivo (+7%), este selectivo cotiza con un descuento destacado frente al Stoxx 600 más amplio. ¿Hasta dónde puede caer la banca?
"Aunque la velocidad de la corrección es sorprendente, creemos que el mercado es muy eficiente a la hora de ajustarse a una mayor probabilidad de recortes de beneficios en comparación con un escenario de 'ricitos de oro' que estaba siendo descontado", explican los analistas de JP Morgan en uno de sus últimos informes.
En este sentido, señalan que la caída de los valores bancarios se debe, fundamentalmente, a tres factores: 25 puntos básicos menos de tipos frente a sus previsiones, con un Euríbor medio a 3 meses del 2,25% frente al 2,50% de su modelo para 2025 (el descenso más acusado afecta a sus márgenes); 10 puntos básicos más de provisiones para insolvencias que los 27 puntos básicos normalizados (excluidos los bancos de mercados emergentes) para 2025; y al crecimiento plano de los préstamos frente a una previsión en torno al 2%, lo que se traduce en aproximadamente un 10% menos de beneficios totales en 2025 frente a sus previsiones.
Así pues, al pasar a las tendencias de recorte de beneficios, ¿por qué no vender el sector? En opinión de JP Morgan, porque el resultado con respecto a las provisiones sigue siendo "muy incierto"; además, su visión es que no habrá recesión, pero también han observado una ampliación de los diferenciales de crédito, aunque desde niveles bajos. "Si bien tenemos un mayor grado de confianza para decir que en 2025 las provisiones serán superiores a lo normalizado, que sean 10 puntos básicos más de lo normalizado o significativamente superiores dependerá del estado de la economía", explican desde la firma neoyorquina.
Por otro lado, JP Morgan se muestra "seguro" de que las provisiones no se acercarán a los niveles históricos de crisis en Europa, como las del 2000 o 2008, debido a cuatro factores. El primero, que no está habiendo un crecimiento "excesivo" de los préstamos; de hecho, "ha sido inferior a los niveles del PIB y negativo en los últimos 18 meses". En segundo lugar, destaca que no está habiendo un exceso de acumulación del apalancamiento, 'carry trades' sistémicos o nuevos productos de apalancamiento.
Además, las ratios de préstamos sobre depósitos (LDR, por sus siglas en inglés) "han mejorado", lo que "ha limitado la liquidación de posiciones en una zona euro con una LDR del 94%, frente al 140% anterior a la crisis financiera global". Por último, la firma estadounidense señala que el riesgo ha aumentado en la expansión del crédito de entidades no bancarias, lo que podría suponer un "riesgo indirecto" para el sector bancario, pero este es un riesgo "significativamente menor" que el observado en otros escenarios históricos.
Con todo esto en mente, ¿cómo posicionarse? Según JP Morgan, dependerá de los datos. Actualmente, apuntan, la probabilidad de rebajas de beneficios es mayor que la de mejoras y el coste de los fondos propios (COE, por sus siglas en inglés) "podría mantenerse alto hasta que tengamos una mejor idea del resultado de la calidad de los activos". Así pues, agregan, "no nos dejemos engañar por la afirmación de que el sector está barato", ya que los fondos propios "son inciertos, dado que podríamos estar cerca de los máximos de beneficios".
Por su parte, los estrategas de Citi señalan que, si los bancos volvieran a los máximos anteriores del coste de los fondos propios, ello implicaría una caída adicional de entre el 15% y el 20%. "Sin embargo, la sensibilidad de los beneficios por acción a los tipos se ha reducido significativamente, gracias en parte a la acumulación de coberturas estructurales, lo que sugiere que el movimiento ya es exagerado", recalcan. Cabe señalar que Citi identifica a Caixabank, HSBC y Natwest como principales valores del sector.
"Los bancos europeos cotizan actualmente a 6,8 veces la ratio precio-beneficio (PER, por sus siglas en inglés) de 2026, pero teniendo en cuenta la dinámica de los beneficios en el futuro, no refleja los posibles recortes adicionales, incluso con un COE implícito muy elevado del 12,3% en 2024 y 6,8 veces el PER, 0,9 vece, la relación precio contable-valor tangible para una rentabilidad sobre fondos propios (ROTE, por sus siglas en inglés) del 13,7% en 2026", sentencian desde JP Morgan.
Desde un punto de vista técnico, los analistas señalan que la corrección es normal, tanto por las fortísimas subidas que han registrado estos valores en los últimos años como por una corrección que entra de los parámetros bursátiles, pues los valores siempre se mueven en dientes de sierra y suelen caer más rápido de lo que suben. Así pues, encontrar puntos de entradas atractivos para estos valores podría ser una buena opción para los inversores que sigan confiando en la evolución del sector a medio y largo plazo.