Evergrande vuelve a estar en la picota. La inmobiliaria china no deja a un lado la polémica, y vuelve a ser noticia tras la detención, este fin de semana, de varios empleados de una de sus filiales financieras. Los hechos han tenido lugar un mes después de declararse Evergrande en bancarrota en EEUU, y han provocado una nueva caída en bolsa de sus títulos.
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Los inversores han mostrado su desconfianza con el valor, que se ha dejado más de un 3% este lunes, aunque ha llegado a caer más de un 24% en la bolsa de Hong Kong.
Los hechos fueron comunicados el sábado por la propia Policía de la ciudad de Shenzhen (donde se encuentra la sede de la compañía), que en un comunicado en el que no detallaba ni el número de detenidos, ni la fecha exacta del arresto o la naturaleza de los crímenes de los que son sospechosos, destacó que se había detenido a un hombre apellidado Du y a "otros presuntos delincuentes" de la empresa Evergrande Financial Wealth Management.
Además, las autoridades aprovecharon la nota para comunicar que aún siguen investigando, por lo que pidieron la colaboración de los ciudadanos para informar de casos de fraude a través de de Internet, teléfono, mensaje o correo electrónico.
Cabe recordar que el pasado mes de agosto la inmobiliaria china pidió la protección del Capítulo 15 de la Ley de Quiebras de EEUU, para proteger los bienes de la compañía en el país mientras se gestionan los acuerdos de reestructuración de la deuda de empresa en Hong Kong y las Islas Caimán.
Ante esta situación, y para ayudar a un sector, el inmobiliario, que está de capa caída, el Gobierno de China ha anunciado recientemente diversas medidas de apoyo, con los bancos estatales abriendo asimismo líneas de crédito multimillonarias a diversas promotoras.
