Prevé una recuperación económicas más lenta y una inflación más alta
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha decidido este jueves cumplir con el guión y bajar en 25 puntos básicos los tipos de interés, de forma que la tasa de depósito (DFR) quedará en el 2,50%, la de referencia para sus operaciones principales de refinanciación (MRO) en el 2,65% y la de la facilidad de préstamo (MLF) en el 2,90%.
Tal y como daban por descontado los analistas consultados por Europa Press, el BCE ha continuado con su ciclo de flexibilización tras la bajada de enero, cuando se decantó por recortar en idéntica proporción.
"En particular, la decisión de reducir el tipo de interés aplicable a la facilidad de depósito se basa en su evaluación actualizada de las perspectivas de inflación, de la dinámica de la inflación subyacente y de la intensidad de la transmisión de la política monetaria", ha argumentado el instituto emisor.
Según el BCE, el proceso de desinflación sigue avanzando, generalmente, conforme a sus proyecciones. Además, la mayoría de los indicadores de la variable subyacente sugieren que esta se estabilizará de forma "sostenida" en torno a la meta deseada del 2% a medio plazo.
Aún así, ha asegurado que la inflación interna sigue siendo "elevada" porque los salarios y precios en algunos sectores aún están ajustándose a la anterior escalada inflacionista con un "retraso considerable".
No obstante, el crecimiento de las nóminas se está moderando y los beneficios empresariales están amortiguando "parcialmente" el impacto sobre la inflación.
El organismo dirigido por Christine Lagarde ha indicado que la política monetaria está adoptando una orientación "considerablemente menos restrictiva" dado que las bajadas de los tipos están reduciendo el coste del crédito para empresas y hogares y el crecimiento de los préstamos está repuntando.
Al mismo tiempo, las anteriores subidas de tipos, que continúan transmitiéndose al saldo vivo del crédito, son un factor "adverso" para la relajación de las condiciones de financiación. La concesión de préstamos sigue siendo "contenida".
El BCE ha insistido en que cuenta con la "determinación" de estabilizar la inflación en el objetivo del 2% a medio plazo, para lo que se aplicará un enfoque dependiente de los datos a la hora de fijar los tipos "reunión a reunión", máxime con el escenario actual de "incertidumbre".
Las decisiones sobre el precio del dinero se basarán en la valoración de las perspectivas de inflación teniendo en cuenta los nuevos datos económicos y financieros, la dinámica de la inflación subyacente y la intensidad de la transmisión de la política monetaria, sin comprometerse de antemano con ninguna senda concreta de tipos.
En cuanto a los programas de compra de activos (APP) y el de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP), el BCE ha indicado que el tamaño de las carteras siguen reduciéndose a un ritmo "mesurado y predecible" al haberse dejado de reinvertir el principal de los valores que van venciendo.
REBAJA LA PREVISIÓN DE CRECIMIENTO
El BCE pronostica que la inflación general se situará en promedio en el 2,3% en 2025, el 1,9% en 2026 y el 2% en 2027. "La revisión al alza de la inflación general para 2025 refleja un mayor dinamismo de los costes energéticos", ha motivado el banco central.
De su lado, la inflación subyacente, aquella que excluye la energía y los alimentos por la mayor volatilidad de sus precios, se situará de media en el 2,2% en 2025, el 2% en 2026 y el 1,9% en 2027.
Sobre la actividad económica, el cuerpo técnico del BCE ahora prevé una recuperación económica más lenta que en las proyecciones de diciembre y avisa de "retos". En conjunto, anticipa un crecimiento del 0,9% en 2025, del 1,2% en 2026 y del 1,3% en 2027.
"Las correcciones a la baja para 2025 y 2026 reflejan un descenso de las exportaciones y la persistente debilidad de la inversión, atribuible, en parte, a la elevada incertidumbre sobre las políticas comerciales y [...] las políticas económicas", ha explicado el informe publicado.
"El aumento de las rentas reales y la desaparición gradual de los efectos de las anteriores subidas de los tipos de interés siguen siendo los principales factores en los que se apoyará la recuperación esperada de la demanda con el paso del tiempo", ha añadido.
DATOS DE INFLACIÓN
La tasa de inflación de la zona euro se situó en febrero en el 2,4% interanual, una décima menos que la subida del mes anterior, lo que puso fin a cuatro repuntes consecutivos del dato.
La evolución de los precios en el área de la moneda común fue reflejo del avance del 0,2% en el coste de la energía tras hacer lo propio en un 1,9% en enero, mientras que los alimentos frescos se encarecieron un 3,1%, un punto y siete décimas más.
Al descontar el impacto de la energía, la tasa de inflación se mantuvo estable en el 2,6%, aunque, de excluirse también el coste de los alimentos, alcohol y tabaco, la subyacente retrocedió una décima, al 2,6%, cifra más baja desde enero de 2022.
Entre los Estados de la UE, los mayores incrementos en febrero correspondieron a Estonia (5%), Croacia (4,7%) y Bélgica (4,4%). Por contra, las menores subidas se observaron en Francia (0,9%), Irlanda (1,3%) y Finlandia (1,5%). En el caso de España, la inflación armonizada fue del 2,9%, medio punto por encima del promedio de la zona euro.