Frente a la reivindicación de una banca pública, no es partidario de usar Bankia como un "instrumento de política económica"
MURCIA, 14 (EUROPA PRESS)
El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha reivindicado "reglas claras" respecto al impuesto de actos jurídicos documentados (AJD) --más conocido como impuesto hipotecario-- para dar "seguridad jurídica" a los clientes, "con independencia de quien asume los gastos, que de eso ya hablaremos posteriormente".
Durante su participación en el almuerzo informativo organizado por Foro Nueva Murcia y al ser preguntado por el efecto de la nueva Ley de crédito hipotecario sobre el sistema financiero, Goirigolzarri ha considerado que la banca, en general, quiere "seguridad jurídica clara" y "evitar la litigiosidad desde el punto de vista judicial".
Y es que ha recordado que se trata de contratos "a muy largo plazo" que "requieren una gran claridad de normas que permanezcan durante la vida de estos contratos". Por ello, ha dado la "bienvenida" a "todo lo que sea dar seguridad jurídica y clarificar la relación con nuestros clientes".
"Sin comerlo ni beberlo nos hemos encontrado con un asunto complejo", según Goirigolzarri, quien ha querido poner en valor que la banca "ha cumplido estrictamente con la ley hipotecaria durante más de 20 años y así ha sido ratificado permanentemente por la Justicia" hasta la reciente sentencia del Tribunal Supremo, que "cambia toda la jurisprudencia".
Durante su intervención en este almuerzo, al que han asistido autoridades y empresarios de la Región, Goirigolzarri ha reconocido que la polémica en torno al impuesto hipotecario ha creado un "fuerte revuelo social" y considera "muy importante apaciguar la situación desde el punto de vista de la imagen y la reputación".
A este respecto, ha señalado que Bankia ha tomado la decisión de "mantener" las condiciones de sus hipotecas "asumiendo el coste del impuesto de actos jurídicos documentados".
En este sentido, ha apostado por poner en valor la utilidad del sistema bancario para financiar a la economía y por "escuchar lo que la sociedad nos está reclamando" porque "es evidente que está muy decepcionada con el funcionamiento del sistema financiero durante la crisis.
"Debemos explicar a la sociedad cuál es nuestro papel, porque la sostenibilidad de un sector reside en que la sociedad lo encuentre útil y quiera que existamos", ha manifestado Goirigolzarri, quien ha apostado por hacer ver que un sistema financiero sólido "es necesario para garantizar un crecimiento sostenido de la economía española, para luchar contra el paro y asegurar un mejor nivel de vida".
Ha remarcado que el sistema bancario español compite comparativamente "en términos de calidad del servicio" con el resto de servicios europeos o de Estados Unidos. Incluso, ha recordado que los costes de financiación de las pymes españolas, si se ajustan con las primas de riesgo, "son de los más bajos de Europa".
De la misma forma, ha puntualizado que las hipotecas españolas tienen los tipos más bajos de Europa junto con Portugal y Finlandia. Ha reconocido que el sistema hipotecario "seguro" que es susceptible de mejora, pero ha recordado que su labor ha sido "muy positiva" para la sociedad española y ha permitido el acceso en propiedad a la vivienda al 80 por ciento de la población.
Ha subrayado que un sistema financiero sólido "pasa por que sea rentable", porque si la rentabilidad está por debajo del coste de capital que requieren los inversores, "estará infracapitalizado y, por tanto, no podrá incrementar sus cartera de créditos, tal y como vivimos al comienzo de la crisis".
BANCA PÚBLICA
Al ser preguntado por la reivindicación de una banca pública efectuada por Podemos, Goirigolzarri ha puntualizado que Bankia "ya es pública" en la medida que el 70% está "en manos del Estado", pero ha recordado que tienen el mandato de desarrollar un proyecto "profesional e independiente" porque "es la mejor manera de devolver los intereses".
Ha remarcado que hay un segundo modelo de banca pública con el que está en desacuerdo, consistente en utilizar Bankia "como instrumento de política económica". A su juicio, hay "huecos" para llevar a cabo esa política, pero ha defendido que no es "acertado" hacerlo en la banca comercial".
En este punto, se ha preguntado si la intención al plantear una banca pública es "dar crédito a potenciales clientes a los que la banca no quiere dárselo". Se trata, añade, de una fórmula que ya se probó en 2013 "y el ratio de mora fue del 80%".
En cuanto a la salida a bolsa de Bankia, ha señalado que la institución tiene un plan estratégico a tres años, hasta 2020, que maneja un escenario que, en esencia, "no se aparta del que tenemos actualmente".
Por otro lado, al ser preguntado por el tipo de interés necesario para garantizar la rentabilidad de la banca, Goirigolzarri ha valorado positivamente que el Banco Central Europeo haya empezado a cambiar las condiciones de la política monetaria expansiva, porque "una política tan laxa puede generar burbujas" y "hay que prepararse para cuando cambie el ciclo expansivo".
A FINALES DE MES CONCLUYE EL AJUSTE DE PLANTILLA
Ha afirmado, además, estar "muy satisfecho" con el proceso de fusión con BMN y ha anunciado que, gracias a la integración, un total de 180.500 clientes de la Región de Murcia no están pagando comisiones con solo tener su nómina o pensión domiciliada, porque "es básico que todos los clientes dispongan de los mismos productos y condiciones".
Ha asegurado que, a finales de este mes, la entidad dará "por cerrado" todo el ajuste de personas derivado de la fusión con BMN, algo clave para evitar que haya "incertidumbre".
Goirigolzarri ha hecho un repaso a la situación de la economía internacional, que mantiene un ritmo de crecimiento "similar" al de hace dos o tres años, aunque ha advertido que esconde detrás una estructura "muy diferente". Y es que, en el pasado, todas las áreas mundiales "crecían de forma acompasada" y ahora "está liderada por los Estados Unidos".
Ha explicado que la ralentización del crecimiento de Europa se debe, en primer lugar, a factores políticos como la "desestabilización" en Italia o el Brexit, que es una "incógnita". Asimismo, lo ha atribuido a la ralentización del comercio internacional y a las medidas proteccionistas, que afectan especialmente a una UE "muy abierta".
Asimismo, ha lamentado que se han acabado estímulos del pasado, como el precio del petróleo, lo que dibuja un escenario internacional de riesgos "a la baja".
ESPAÑA DEBE REDUCIR DÉFICIT Y DEUDA
España, por su parte, afronta una "nueva etapa" de su fase cíclica expansiva tras cuatro años con un crecimiento del PIB superior al 3%, ya que este año se situará en el 2,5% y en 2019 lo hará al 2 o 2,2%. No obstante, ha explicado que esta pérdida de impulso se preveía desde hace varios trimestres y "no siempre es negativa".
Goirigolzarri ha advertido que "debemos estar muy atentos" a los riesgos de carácter exterior y ha señalado que, a medio y largo plazo, la economía española debe aspirar a crecimientos sostenidos en torno al 2 o 2,5% porque "es la única forma de acabar con su principal lacra, que es el paro".
En este sentido, ha indicado que hay dos grandes retos por delante, como es controlar el déficit para evitar un "efecto Italia" y reducir la deuda pública, que hoy "no se ve como preocupante" debido a la situación de la economía, pero que es la "principal debilidad" de España. Otro de los retos de la economía española, a su juicio, es mejorar la empleabilidad del capital humano, especialmente ligada a la Educación, porque "sería un cuello de botella para nuestra competitividad".