MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
La gestora Columbia Threadneedle ha apostado por la deuda de grado de inversión ('investment grade', en la jerga) y las cotizadas de pequeño tamaño de acuerdo a sus previsiones sobre los tipos de interés en la segunda mitad del año, que esperan que vayan decreciendo y apoyando un desarrollo resiliente de la economía.
La entidad ha señalado que, en el apartado de renta fija, se mantienen constructivos en deuda corporativa de grado de inversión, porque los fundamentales de las empresas así lo respaldan, aunque no tanto las valoraciones.
"Es la primera vez en 20 años que el crédito 'investment grade' ofrece una mejor rentabilidad que la renta variable", han explicado desde la firma, en tanto que han cifrado en el 5% los rendimientos globales de este tipo de deuda.
"Estos rendimientos más altos hacen que sea más probable que esta clase de activos pueda retomar su papel como elemento diversificador [...] después de una década de bajos rendimientos que limitaron esa capacidad", han remachado sobre este punto.
Dentro de la estrategia en renta variable, han explicado que, tras un periodo de año y medio en el que las compañías de gran capitalización han cosechado los mejores resultados, prevén para este año y el próximo "una ampliación del mercado" de la mano de las cotizadas de menor tamaño ('small caps', en la jerga), ya que son las que más se beneficiarán de la relajación monetaria de los tipos.
"Una bajada de los tipos representaría un bálsamo para estas compañías", ha acompasado la directora global de acciones, Merda Mergen.
De su lado, la ejecutiva ha ahondado que las grandes capitalizadas "no son tan sensible a los tipos de interés como la gente piensa", pues se beneficiaron de los tipos de interés "irrisorios" en 2020 para construir deudas a largos plazos y tipos reducidos.
En concreto, la gestora materializaría esta apuesta por 'small caps' en Europa y mercados emergentes, si bien mantiene una filosofía 'stock picking' para identificar a los ganadores locales que exhiban un notable descuento en estos mercados.
De cara a la coyuntura macroeconómica, la entidad ha señalado que el contexto geopolítico, los elevados déficits fiscales y la inflación persistente por encima del objetivo de los bancos centrales se mantendrán como las principales fuentes de volatilidad para los mercados en el segundo semestre de 2024.