Del Valle y más inversores mexicanos creen que Deutsche, Barclays, Pimco y otros habrían suscrito una ampliación por 4.000 millones
MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
BBVA envió al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) una carta el pasado 6 de junio en la que afirmaba que no estaba en disposición de presentar una oferta por Popular en las condiciones que propuso el organismo debido a las "limitaciones de precio" y a la "insuficiente información disponible" y que habría estado "interesado" si hubiera dispuesto de más información.
"Habida cuenta de las limitaciones de precio y las restantes condiciones impuestas en la carta de proceso, así como la insuficiente información disponible, BBVA no está en disposición de presentar una oferta en los términos de esa carta de proceso y del contrato de compraventa remitidos en el día de hoy", expuso la entidad al organismo presidido por Jaime Ponce.
Así se recoge en la carta que algunos inversores mexicanos, liderados por el exconsejero de Popular Antonio del Valle, enviaron al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, el pasado 22 de enero, a la que ha tenido acceso Europa Press.
En esta misiva, los accionistas exponían que España había incumplido las garantías y medidas de protección establecidas en el 'Acuerdo para la Promoción Recíproca de Inversiones entre los Estados Unidos Mexicanos y el Reino de España'.
Por esta razón, han comenzado un procedimiento de arbitraje internacional contra España, con el que aspiran a recuperar una inversión de unos 470 millones de euros.
En la carta recuerdan que las condiciones que puso el Frob en la 'process letter' enviada a varias entidades la víspera de la compra de Popular por Santander establecían que el precio que se pagara por el banco debía ser igual o mayor a un euro.
Los inversores defienden que los plazos dados por el Frob en su 'Carta de proceso' "no otorgaban a licitadores que no fuesen Santander ni tiempo ni información suficiente que les permitiese presentar una oferta dentro del plazo límite establecido".
Para ilustrar esta circunstancia, citan una carta enviada por BBVA al Frob el mismo 6 de junio, en la que el banco presidido por Francisco González apuntaba que, si hubiera dispuesto de información "suficiente" para analizar la operación, habría estado "interesado".
"No obstante lo anterior, igualmente les confirmamos que si se dispusiera de información suficiente que permita a sus órganos de gobierno analizar debidamente la operación y se pudieran modificar las condiciones del proceso, BBVA sí estaría interesado en participar en el mismo", señalaba el banco.
En todo caso, el presidente ejecutivo de BBVA, Francisco González, se mostró durante la presentación de los resultados del banco de 2017 "encantado" de no haber adquirido Popular.
"Estamos absolutamente encantados de no haber comparado Popular, porque tendríamos un problema", apuntó González a principios de febrero, haciendo referencia a que, de haberse hecho con la entidad, su equipo estaría en estos momentos centrado en "arreglar" la situación de Popular.
AMPLIACIÓN DE CAPITAL DE 4.000 MILLONES
En el procedimiento de arbitraje, el grupo de inversores liderado por Del Valle también incide en que el Gobierno no se planteó la opción de realizar una ampliación de capital en Popular, operación que, en su opinión, contaba con el apoyo de diferentes actores del panorama financiero.
De hecho, aseguran que en el momento de la resolución los inversores de Popular ya habían manifestado al Banco de España su intención de aportar 1.000 millones de euros al aumento de capital e informan de que Barclays también estaba interesado en participar.
En este sentido, agregan que Deutsche Bank indicó en una carta remitida a Popular el 5 de junio que estaría interesado en asegurar 2.000 millones de euros de una hipotética ampliación de capital en 4.000 millones de euros.
Además, indican que Pimco pretendía aportar 300 millones a la operación, como adelantó 'El Mundo', e inciden en que antiguos y potenciales inversores de Popular, entre los que se encontraba la familia Luksic y el propio Del Valle, confirmaron su interés en la operación.
En relación a estos últimos, señalan que mantuvieron reuniones de forma "activa" con bancos de inversión que hubiesen apoyado la ampliación de capital en los días previos a la resolución de la entidad.
"España nunca ofreció a los inversores de Popular la oportunidad de poner en marcha estas medidas, ni otras alternativas, que habrían evitado la resolución de la entidad y, por consiguiente, habrían protegido las inversiones de accionistas y bonistas", lamentan en su escrito.