La presidenta de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, Cani Fernández, ha mostrado su asombro por que los bancos no estén remunerando los depósitos de sus clientes, especialmente con los tipos de interés en el 4% y en máximos de más de 10 años.
“Me sorprenden cosas. A mí me cuesta trabajo pensar que no haya un banco que quiera ganar clientes si yo (como banco) me dedico a captar depósitos para luego así poder prestar dinero. Me cuesta entender que no quieran aumentar su cuota de mercado, salvo que uno vea plácidamente que los demás tampoco lo hacen", ha respondido durante su intervención en unas jornadas organizadas por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo y la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE).
Esta ha sido una cuestión candente en los últimos días. El lunes, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, instó al sector a empezar a pagar “adecuadamente” a los clientes por sus ahorros. La respuesta de banqueros como Torres (BBVA) o Goirigolzarri (CaixaBank) ha sido tibia, mientras que González-Bueno (Sabadell) ha asegurado que el pago por los depósitos llegará “por la competencia, no porque lo diga la vicepresidenta”.
Por su parte, la CNMC ha subrayado que la autoridad sí tendría capacidad para actuar si se diesen casos de 'price signaling', es decir, cuando los bancos deciden coordinadamente coordinada no subir los depósitos hasta un momento determinado o en una situación de posición de dominio por parte de una entidad bancaria. No obstante, señala Fernández, esto no existe en el mercado “transparente” español.
“Con la mera observación de lo que hacen los demás me basta para tomar mis decisiones. Eso, de acuerdo con la jurisprudencia de la Unión Europea y la española, se llama adaptarse inteligentemente al comportamiento de sus competencias”, ha señalado con cierta sorna la presidenta de la CNMC.
Con todo, Fernández ha constatado la existencia de un “agujero” en el conjunto de herramientas que tiene la CNMC para actuar en estas situaciones de colusión tácita.
Cabe recordar que esta colusión tácita hace referencia a una situación en la que las empresas se coordinan de forma indirecta en torno a un producto o servicio, es decir, mediante su comportamiento en el mercado.
Por otro lado, Fernández ha comentado que en otros países como Reino Unido o Alemania se está debatiendo en los respectivos parlamentos las modificaciones legislativas para introducir la figura de las investigaciones de mercado desde el ámbito de Competencia.
Con estas investigaciones se garantiza la obtención de la información necesaria para Competencia, porque la empresa puede acarrear sanciones si no entrega la documentación. Además, si cuando termina la investigación del mercado y se constata que hay poca competencia, se pueden adoptar medidas estructurales o de comportamiento para reponer la situación de competencia en el mercado.
De este modo, con estas investigaciones, también conocidas como 'new competition tool', se podría permitir la lucha contra casos de colusión tácita, es decir, no hay un acuerdo colusorio firme pero sí sucede en la práctica.