"Los inversores pueden esperar años de sólido crecimiento" en los mercados. Así lo asegura Berenberg en uno de sus últimos informes, en el que se muestra también muy optimista sobre el desempeño que tendrá el PIB mundial en 2021, ahora que la vacuna contra el Covid-19 está empezando a suministrarse en muchos países. Y con este panorama, dice, la estrategia a seguir está clara: apostar por la bolsa y alejarse del dólar.
Como dicen los expertos de la firma alemana, "nuestros llamamientos a favor del crecimiento económico justifican un cierto aumento de los activos de riesgo y un mayor flujo de dinero desde refugios como el dólar estadounidense a otras monedas en 2021". No obstante, también hacen una advertencia: "El punto dulce del ciclo no durará para siempre".
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Y es que, una vez que la inflación regrese, como cree que pasará dentro de poco, "los mercados ya no superarán la actividad económica". Hasta que eso ocurra, los inversores deben seguir la estrategia marcada si quieren aprovechar al máximo el "sólido crecimiento" que está por venir, también en lo que a Producto Interior Bruto se refiere, apunta Berenberg.
Porque "una vez que la actual ola de la pandemia haya seguido su curso, esperamos que la actividad se expanda rápidamente a partir del segundo trimestre de 2021". Así lo afirman estos analistas, que se basan en lo ocurrido tras la primera ola para hacer estas proyecciones.
Tal y como señalan, "con la ayuda de un apoyo político sin precedentes, la actividad económica se recuperó con una rapidez asombrosa una vez que las restricciones se redujeron de mayo a octubre. Esto es un buen augurio para 2021". Sus previsiones son muy optimistas: en Berenberg esperan un crecimiento del PIB en 2021 del 5% tanto en EEUU como en la Eurozona, del 3,4% en Japón y del 7,3% en Reino Unido, proyecciones todas ellas que "están muy por encima del consenso de Bloomberg", recuerdan estos expertos.
¿QUÉ ESPERAR DE LOS MERCADOS?
Asimismo, señalan que ahora, tras la recesión de 2020, "los mercados se encuentran en la fase inicial de un nuevo ciclo, en vez de en la fase final de un ciclo de envejecimiento". Y por eso creen que el avance seguirá imparable apuntalado por un "apoyo monetario y fiscal récord".
"Después de que los mercados se derrumbaron cuando la pandemia se extendió a Europa y a EEUU a principios de marzo, comenzaron a anticipar el rebote económico que vendría a partir de finales de marzo. Si bien habíamos calificado la magnitud del desplome de marzo en los mercados como un pánico irracional, el alcance del posterior repunte sorprendió incluso a los optimistas como nosotros. A pesar de una corrección previa a la Navidad, los mercados se han adelantado a nuestras proyecciones alcistas del PIB", concluyen.
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