- Las otras cuatro que reparten dividendos son Logista, Ence, BME y Naturhouse
- El Ibex 35 ajustado a dividendos sube un 13,5% en 2017 y está a un 6,5% de sus máximos históricos
Los ‘cazadividendos’ tendrán una buena oportunidad de afinar sus carteras entre la última semana de agosto y la primera de septiembre. Durante el último tramo de verano los accionistas de cinco compañías cotizadas de la bolsa española recibirán una retribución en efectivo a cuenta de los resultados de 2017. Estas empresas repartirán más de 386 millones de euros entre sus ‘dueños’.
La normativa establece para las empresas españolas que los inversores con derecho a cobro del dividendo serán los que tengan la acción dos días antes a la fecha del abono en lo que se considera la fecha de descuento. Por lo tanto, si una empresa paga un viernes 5 el dividendo, el día 3 es la fecha de descuento y la sesión del martes 2 la última en la que se puede comprar esta acción con derecho a recibir la retribución.
La excepción a esta regla radica en empresas con sede en otros mercados pero que tienen acciones a cotización en España. Es decir, lo que ocurre con Coca-Cola European Partners, que pagará a sus accionistas una retribución bruta de 0,21 euros brutos por acción con cargo al beneficio de este año. El abono será el 11 de septiembre, aunque la fecha de descuento está en este viernes 25 de agosto. Es decir, este jueves es el último día para comprar acciones de la embotelladora europea de las bebidas de Coca-Cola con derecho a dividendo. Durante el primer semestre, con otro dividendo de la misma cuantía, desembolsó 286 millones de euros, según figura en la cuenta de resultados.
- 32,980€
- 3,03%
- 74,800€
- 3,88%
- 2,860€
- -0,63%
- 30,360€
- 1,34%
- 1,695€
- -0,59%
Además, cuatro compañías que cotizan únicamente en España también retribuirán a sus accionistas durante las dos próximas semanas. El dividendo más inmediato es el de Compañía de Distribución Integral Logista, con un pago a cuenta de 0,3 euros brutos con cargo a los resultados de 2017 que se producirá el 30 de agosto, con lo que el próximo lunes 28 será la fecha de descuento y, este viernes, la última sesión para adquirir títulos con derechos. La empresa tiene más de 132,7 millones de acciones, con lo que el pago será de más de casi 40 millones de euros.
La siguiente cita del calendario es Ence Energía y Celulosa, con un pago a cuenta de los resultados del presente ejercicio de 0,061 euros brutos por título. El abono se producirá el 6 de septiembre y la fecha de descuento está programada para el día 4 del próximo mes. La firma del sector papelero pagará 15 millones de euros en dividendos a sus accionistas.
Por su parte, Bolsas y Mercados Españoles (BME) abonará 0,4 euros brutos por cada acción el 8 de septiembre, dos días después de la fecha de descuento. En este caso, el organizador del mercado tiene 83,6 millones de títulos cotizando, con lo que el desembolso será de 33,5 millones de euros entre los inversores que los tengan en cartera.
Naturhouse cierra, el mismo día que BME, esta oleada final de dividendos programados para lo que queda de verano el 8 de septiembre -el 6 de septiembre será la fecha de descuento-. El grupo de nutrición y dietética retribuirá con 0,2 euros brutos por cada una de las 60 millones de acciones que tiene en circulación, con un importe total para remunerar a los accionistas de 12 millones de euros. Como en los anteriores casos, con cargo a los resultados de 2017.
PAGOS EN EFECTIVO
Estos dividendos, como casi todos los que se han producido en las últimas semanas, son únicamente en efectivo. Es decir, se reducen los casos de ‘scrip dividend’ que se popularizaron durante la crisis, especialmente entre la banca y otros ‘blue chips’ del Ibex 35 -el índice, ajustado con dividendos, se dispara un 13% este año y está a un 6,5% de sus máximos históricos-. Este método consiste en una ampliación de capital y, a partir de ella, los inversores pueden elegir entre cobrar el dividendo en efectivo o en nuevas acciones.
La moda está condenada a (casi) su desaparición por dos razones. La primera, la mejoría de las cuentas de resultados de las compañías, que tienen mayor margen para destinar parte o la totalidad del beneficio a los dividendos. La segunda, el cambio fiscal. Los accionistas que cobren los dividendos de las cinco empresas que retribuirán a sus accionistas antes de que acabe el verano tendrán una retención del 0,19% en la cuantía bruta. Posteriormente, en la declaración de la renta, tendrán que ajustar con Hacienda los ingresos por rendimientos del capital. La suma de estas rentas se tributa al 19% hasta los 6.000 euros, al 21% hasta los 50.000 euros, y del 23% en adelante. El pago en nuevas acciones estaba ‘libre’ de tributar hasta el momento de su venta. Pero el Ministerio de Cristóbal Montoro eliminó esta ventaja fiscal desde este año.
