Las palabras de Mario Draghi anunciando que el Banco Central Europeo (BCE) hará cambios en su política monetaria en diciembre y que están trabajando sobre todas las herramientas de las que disponen (aunque aún no han tomado ninguna decisión concreta) no sólo sirvieron para animar a las bolsas europeas y americanas, también a las asiáticas.
El Nikkei ha cerrado con unas alzas ligeramente superiores al 2%, en niveles de 18.800 puntos, mientras que en el resto de plazas también hemos visto números verdes. En China, subidas en el Hang Seng del 1,39% y más moderadas en el Shanghai (+0,93%).
En cuanto a los datos macro que se han publicado en la zona este viernes, tenemos que el PMI manufacturero de Japón de octubre ha salido mejor de lo esperado, en 52,5 frente al 50,6 esperado. Por su parte, el índice líder final de agosto se ha situado en 103,50, en línea con lo previsto. Por su parte, en China, el índice líder económico Conference Board de septiembre ha quedado en el +1,6% frente al 1% anterior mientras que los precios y las ventas de viviendas han mostrado signos de mejoría sostenida en lo que va de año, aunque la inversión lenta en el desarrollo de bienes raíces sugiere que un cambio global en el mercado inmobiliario va a llevar su tiempo.
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