- Desde marzo de 2009, el S&P 500 se ha revalorizado un 330%
- El ciclo alcista anterior acabó con el estallido de la burbuja de las tecnológicas
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Wall Street celebra este miércoles, 22 de agosto, un récord muy especial. El mercado alcista que comenzó el 9 de marzo de 2009 se ha convertido en el más largo de la historia, al superar la anterior marca de 3.542 días. "Preparen el champán para las acciones americanas", comentó hace unas sesiones el jefe de inversiones (CIO) de Bank of America Merrill Lynch, Michael Hartnett. Sin embargo, los antecedentes no auguran un buen futuro al índice tras esta racha al alza: los récords anteriores dieron paso al 'crash' del 29 y al estallido de la burbuja 'puntocom'.
Han pasado más de nueve años desde que el S&P 500, el principal indicador mundial, tocó un mínimo en la simbólica cifra de 666 puntos, que, en esta ocasión, se convirtió en un suelo de mercado a partir del cual la Bolsa de Nueva York inició una tendencia alcista que ha superado los récords anteriores de duración.
En la actualidad, el S&P 500 cotiza cerca de su máximo histórico marcado el pasado 26 de enero en niveles de 2.872,87 puntos. Desde su mínimo de 2009, el indicador se ha revalorizado un 330%, con una rentabilidad anual media del 17,7%.
Pero este hito no necesariamente es bueno de cara al futuro. "Dicen que los mercados alcistas no mueren de viejos y muchos se preguntan si este período excepcional para el mercado bursátil estadounidense terminará en lágrimas", apunta Laith Khalaf, analista de Hargreaves Lansdown. Los antecedentes no han traído nada bueno después.
El ciclo anterior más extenso tuvo lugar en los años 90 y duró 3.452 días. Un periodo en el que el índice avanzó un 420% y que finalizó con el estallido de la burbuja de las 'puntocom' en marzo de 2000. Anteriormente, otro ciclo al alza semejante al de ahora duró hasta que en 1929 Wall Street colapsó, lo que pasaría a llamarse el 'crash del 29'.
Cada vez son más las voces que anticipan una gran corrección para la Bolsa de Nueva York, pero esta no termina de producirse
Sin embargo, la mayoría de los analistas de momento no hay motivos para alarmarse. El hecho de que los inversores se planteen abiertamente qué puede pasar ahora sugiere que no estamos en medio de la "exuberancia irracional" de finales de los años 90 (cuando nadie pensaba que la subida fuera a acabar), aunque intentar calcular cuánto tiempo más puede durar la racha actual es difícil, considera el analista de Hargreaves Lansdown.
¿LA TENDENCIA ACTUAL ACABARÁ IGUAL DE MAL?
En este escenario, cada vez son más las voces que anticipan una gran corrección para la Bolsa de Nueva York, pero esta no termina de producirse. El primer indicador que por el momento no hace temer un nuevo mercado bajista es que la economía estadounidense va 'viento en popa', impulsada por la bajada de impuestos y el aumento del gasto público aprobados hace unos meses por la Administración Trump. Así, la probabilidad de una recesión en EEUU durante los próximos doce meses es muy baja, tan sólo del 10%, por lo que muchos inversores permanecen plenamente invertidos.
En este contexto, una señal de alarma, pese a que resulte paradójico, es el récord de valoración bursátil que ha alcanzado Apple. El fabricante del iPhone ha superado el billón de dólares por valor en bolsa, pero analistas como los de Morgan Stanley consideran que esto puede indicar un techo de mercado, porque cada vez son menos los valores que están liderando las ganancias en Wall Street.
Por el contrario, Canaccord Genuity, el mayor alcista de Wall Street, prevé que el S&P 500 termine el año en 3.200 puntos, una ganancia del 12%. “Cualquier pausa en el mercado debería ser considerada como una oportunidad”, ha comentado Tony Dwyer, su estratega jefe.
“No hay duda de que las noticias impredecibles y la potencial guerra comercial entre China y EEUU, junto a una subida del bono a 10 años por encima del 3%, pueden aumentar la volatilidad. Pero el fondo macroeconómico sigue dándonos una oportunidad para aumentar el riesgo”, ha añadido.
En cualquier caso, el análisis técnico dice que, por el momento, el índice presenta una clara tendencia alcista. "En la medida en que el índice continúe construyendo mínimos y máximos crecientes semanales y, sobre todo, se respete el soporte de los 2.690 puntos (último mínimo creciente), sólo cabe seguir manteniendo las posiciones alcistas", explica José María Rodríguez, analista de Bolsamanía. Mientras tanto, el champán puede seguir 'corriendo' por Wall Street, aunque algún día se acabará la 'fiesta'.
SUSTOS POR EL CAMINO
El S&P no ha registrado una corrección superior al 20% en los últimos nueve años, porcentaje a partir del cual es definido un mercado bajista para cualquier subyacente. A lo largo de este tiempo, la corrección más importante se registró entre abril y octubre de 2011, cuando el índice cayó un 19,4%. Otra caída importante fue la registrada entre mayo de 2015 y febrero de 2016, cuando el descenso fue del 14,2%.
Tras un 2017 marcado por la ausencia de correcciones y una bajísima volatilidad, el ejercicio 2018 comenzó a 'todo gas', lo que permitió al S&P 500 marcar el mencionado récord del 26 de enero. Sin embargo, cuando los inversores eran más complacientes que nunca se llevaron un buen susto. En apenas una semana, el indicador se desplomó un 10% y la volatilidad se disparó, lo que recordó a los operadores que la renta variable siempre es un activo de riesgo.