La ministra de Economía y Empresa en funciones, Nadia Calviño, ha confirmado este martes que el Tesoro Público español se está preparando para poder emitir bonos verdes a partir del año que viene, y ha indicado que la "mayoría" de la financiación de 236.000 millones de euros necesaria hasta 2030 para la transición ecológica y el cambio climático provendrá del sector privado, y la parte pública se especificará cuando se constituya Gobierno.
Así lo ha señalado Calviño en rueda de prensa en el marco de la Cumbre del Clima (COP25), en el que ha indicado que la transición ecológica requerirá de unos 236.000 millones de euros en inversiones en la próxima década, según recoge el Plan de Energía y Clima, de los que la mayor parte provendrá del sector privado y el resto de la Administración pública, con un papel "importante" en infraestructuras y en garantizar una "transición justa".
Calviño ha explicado que la parte de inversión pública para este proceso se concretará cuando se constituya un Gobierno con plenas funciones y ha indicado que este volumen de inversiones para la próxima década incluye las políticas relacionadas con la eficiencia y el ahorro energético, también en las viviendas, las energías renovables, las infraestructuras, la red de interconexión inteligente, la movilidad sostenible o la gestión eficiente del agua, entre otros.
En este sentido, ha señalado que en los últimos años se ha intensificado el desarrollo de instrumentos para facilitar una transición ecológica y que el sector privado y público dispongan de elementos para colaborar con las inversiones necesarias.
De esta forma, distintos operadores públicos y privados han empezado a emitir bonos verdes y sostenibles, como es el caso del Instituto de Crédito Oficial (ICO), que este año realizó una emisión de bonos verdes por valor de 500 millones de euros.
"Trabajamos para que el año próximo podamos emitir desde el Tesoro del Reino de España bonos verdes", ha confirmado Calviño, quien ha indicado que ante este mercado "en crecimiento", hay que proceder a su diseño "correcto" para que en la próxima década se consiga establecer un marco adecuado para financiación e inversiones pública y privadas.
Para ello, ha precisado que se trabaja en la "taxonomía" para definir qué es y no verde y los inversores tengan certidumbre a la hora de comprar bonos de que el dinero se destina a inversiones ecológicamente sostenibles, evitando también el llamado 'green-washing', la vía que usan algunas empresas para proyectar una mejor imagen de compromiso con el medio ambiente.
En el ámbito europeo, ha apuntado que hay que reforzar los mecanismos de transparencia por parte de los inversores y empresas y de las instituciones financieras. "Necesitamos alinear todas las políticas para movilizar toda la inversión pública y privada, y necesitamos un marco coherente a nivel mundial y europeo", ha enfatizado, precisando, eso sí, que "la mayoría de la inversión tendrá que venir de fuentes privadas".
"LA CUMBRE YA ES UN ÉXITO"
La titular de Economía en funciones ha aseverado que la Cumbre del Clima "ya es un éxito" dada la movilización de participantes, el "alto nivel" de las discusiones y el "enorme compromiso" de todos los líderes mundiales, y ha resaltado que "todo el mundo" está "francamente admirado" y muestra un "enorme respeto" por la capacidad de España de organizar la cumbre en un poco tiempo.
Según Calviño, en los días transcurridos desde el inicio de la cumbre se ha constatado que "queda mucho por hacer" y es "urgente" avanzar intensificando el trabajo y la coordinación entre el cambio climático y las política financieras y económicas para abordar los retos de cambio climático y transición ecológica al tiempo que se protege la creación de empleo y el crecimiento de empleo inclusivo.
A este respecto, ha resaltado la participación de los ministros de Economía y Hacienda que en anteriores ocasiones no se había producido, con la reunión de la coalición de ministros de Finanzas para la acción climática, y ha valorado que la transición ecológica sea un "asunto prioritario" en el nuevo mandato de la Comisión Europea y de implicar a la política económica para crear empleos de alta calidad, fomentar la descarbonización y hacer frente al cambio climático.
En este contexto, ha asegurado que España juega un papel "muy activo" en el desarrollo de la taxonomía para definir qué es verde, la presupuestación verde, la fiscalidad, los mecanismos compensatorios de CO2 en frontera o los mercados de carbón.