Las caídas moderadas se han impuesto en Asia esta madrugada, aunque el principal índice chino, el Shanghai, se ha animado a última hora (+0,3%) tras la arenga del presidente chino, Xi Jinping, que ha advertido en las celebraciones del centenario del Partido Comunista que no permitirá que ninguna fuerza extranjera intimide, oprima o subyugue a China.
"Cualquiera que se atreva a tratar de hacerlo se encontrará con su cabeza golpeada sangrientamente contra la Gran Muralla de acero forjada por más de 1.400 millones de chinos", ha afirmado, provocando los aplausos de una audiencia invitada de 70.000 personas reunidas en la enorme plaza de Tiananmen.
Las palabras de Xi han contrarrestado el efecto negativo del índice Caixin/Markit de gestores de compra de la industria manufacturera de junio, que se situó en 51,3, una lectura inferior a mayo (52,0) y también por debajo de la previsión de 51,8. El PMI manufacturero oficial de China correspondiente a junio, publicado el miércoles, mostró un menor crecimiento de la actividad fabril.
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Por su parte, el Nikkei de Japón cedió un 0,38%, mientras que el Topix cayó un 0,25%. El índice de confianza de los grandes fabricantes, publicado este jueves por el Banco de Japón en su encuesta trimestral tankan, se situó en 14 puntos, frente a los 5 puntos de marzo.
El Kospi de Corea del Sur bajó un 0,47%, mientras que las acciones australianas también cayeron, con el S&P/ASX 200 dejándose un 0,45%.
Los mercados de Hong Kong cerraron este jueves por festivo.
Los inversores asiáticos esperan ya el Informe de Empleo de junio que se publicará este viernes en Estados Unidos.
