Estée Lauder, empresa estadounidense de maquillaje, perfumes y productos para el cuidado de la piel, está teniendo un 2023 muy adverso. Así, sus títulos se dejan cerca de un 45% en Wall Street desde enero lastrados por una recuperación de la demanda más lenta de lo esperado, especialmente en China. Sin embargo, los analistas de Morningstar se muestran plenamente confiados en su potencial alcista.
En concreto, estos expertos incluyen al grupo de belleza en su lista de acciones infravaloradas en las que invertir en el momento actual. Así, consideran que la empresa ha fortalecido su posición competitiva con marcas líderes en cuidado de la piel, cosméticos y fragancias; conservado el estatus de proveedor preferido en los canales tradicionales y digitales.
“Vemos a Estée Lauder preparada para beneficiarse del mayor interés social por los productos de belleza de calidad y creemos que está bien posicionada en varios mercados, entre ellos el asiático, gracias a la reputación de sus marcas y su apuesta por la innovación”, comentan estos expertos.
Igualmente, son optimistas con sus inversiones en canales digitales, “que permitirán a la compañía reforzar sus vínculos con los minoristas tradicionales y aumentar la accesibilidad de sus productos”.
PRECIO OBJETIVO DE 249 DÓLARES
Con estas premisas en mente, los citados analistas fijan su precio objetivo en los 249 dólares por acción teniendo en cuenta “el sólido foso económico de la empresa, las numerosas marcas de prestigio con las que cuenta, como La Mer, Bobbi Brown o Jo Malone London, y sus ventajas de escala”.
“Nuestra estimación de valor razonable implica un múltiplo de 51 veces frente a nuestra estimación de ganancias ajustada para el año fiscal 2025 y un múltiplo empresarial de valor empresarial respecto al ebitda ajustado de 28 veces”, argumentan desde Morningstar.
En cuanto a sus pronósticos de ingresos, estos expertos esperan que crezcan a una tasa anual compuesta del 7,3% durante los próximos 10 años ante los buenos augurios de la belleza prémium a escala mundial y la capacidad del grupo de superar al mercado en su conjunto gracias a su enfoque en la categoría de cuidado de la piel.
RIESGOS E INCERTIDUMBRES
Pese a estas favorables perspectivas, los mencionados gestores reconocen que Estée Lauder, al operar en más de 150 países, también tiene riesgos ante sí, como su dependencia de las políticas comerciales en todo el mundo, los posibles problemas que puedan surgir en las cadenas de suministro y el haber perdido terreno frente a su rival L’Oréal en el desarrollo de productos dermatológicos.
Asimismo, señalan que la proliferación de mercados en línea y marketing digital ha alterado el mercado de la belleza al reducir las barreras de entrada y acelerar la comercialización de nuevos productos, particularmente en maquillaje.
BALANCE FAVORABLE
No obstante, Morningstar insiste en que Estée Lauder está bien posicionada para aprovecharse de las oportunidades de crecimiento y considera que su nueva fábrica en Japón y su centro de innovación en China deberían servir para atender mejor las necesidades de los consumidores en el importante mercado asiático con productos más relevantes y plazos de entrega más cortos.