Adiós a la idea de que el coronavirus iba a afectar a los datos económicos del segundo trimestre y de que en la segunda parte del año se vería la recuperación. Adiós a la idea de que la bolsa recogería esa mejora económica y reaccionaría en la segunda mitad de 2020. El consenso -salvo contadas excepciones- habla ya de recesión, y hay incluso quien advierte de que, como no se actúe de forma coordinada y con premura, habrá una depresión. La bolsa, como no podía ser de otra manera, reflejará todo este escenario negativo. Por eso, hablar de acabar el año con subidas en los principales índices, o incluso de terminar planos, es más un sueño que una realidad.
De media, las plazas europeas se dejan un 40% desde los máximos del año marcados en febrero; desde principios de 2020, los descensos son similares. En Wall Street, desde comienzos de año los recortes son del 20% en el Dow Jones y del 9% en el Nasdaq (y del 20% y el 18% desde máximos, respectivamente).
"El año está perdido para las bolsas. El objetivo de este 2020 es que se haga una figura de fin de las caídas y empezar una recuperación poco a poco. Eso no debería tardar, pero el Ibex y el resto de bolsas no van a poder recuperar lo perdido. El daño está ya hecho", explica César Nuez, analista de Bolsamanía y responsable de TraderWatch. "Si mañana sacan una vacuna, por ejemplo, los índices subirían, pero el año ya es historia. Lo importante de este año es que esto no se convierta en un ciclo bajista", recalca Nuez.
"Ahora mismo, caer un 20% en el año sería un éxito con todas las dudas que tenemos por delante", afirma tajante José María Rodríguez, analista de Bolsamanía.
NINGÚN REBOTE PALIARÁ LA DEBACLE
Paul Markham, gestor de la cartera de renta variable global de Newton Investment Management, comparte esta idea. "Es posible que las bolsas consigan rebotar a medida que pase el año, pero esos rebotes no las devolverán a los niveles inmediatamente anteriores" al Covid-19.
Antes de la crisis sanitaria que asola al planeta, las bolsas estaban o en máximos de varios años o en máximos históricos. El panorama ha cambiado tanto en tan poco tiempo que las previsiones de la mayoría de expertos, que esperaban un 2020 de continuación de las subidas, han quedado en 'agua de borrajas' y deben ser revisadas y cambiadas drásticamente.
"Hace apenas un mes, los mercados de todo el mundo se encontraban en su punto álgido, o dentro de los máximos históricos o plurianuales, con un optimismo fuera de lugar en relación con que este brote pudiera ser contenido. Ahora estamos aquí un mes después, y es difícil imaginar cómo podríamos volver a acercarnos a estos niveles", recalca Michael Hewson, estratega jefe de CMC Markets en Londres.
¿BUSCAR OPORTUNIDADES?
Pese a la situación de caos y desplomes, los más intrépidos creen -aunque sin dar nombres concretos de empresas- que es un buen momento para 'lanzar la caña' y tratar de buscar empresas apetecibles tras el batacazo.
"Las acciones seguirán volátiles. Sin embargo, ya se están presentando oportunidades en empresas financieramente sólidas con un crecimiento plurianual y modelos de negocio diferenciados. Muchas de ellas están disponibles actualmente a precios materialmente más bajos que hace un mes. Se necesitará un nervio fuerte y puede que veamos oscuridad antes de ver la luz. Sin embargo, para aquellos que adoptan una visión a largo plazo, están empezando a surgir atractivos puntos de entrada", avisa Paul Markham.
Naeem Aslam, de Avatrade, recomienda "estar preparados para reaccionar". "Creo que es hora de que los inversores empiecen a preparar sus listas de compras y a buscar acciones que hayan bajado más del 50%", apunta.