- 257,680
- 0,68%
Las bolsas asiáticas han cerrado en negativo este martes pese al repunte de la actividad económica en China. Los inversores han decidido vender tras el cierre bajista de Wall Street, a la espera de las numerosas referencias que se publicarán en los próximos días.
El Hang Seng de Hong Kong ha liderado las ventas, al igual que hizo el lunes, después de su impresionante rally de las últimas semanas, seguido por el Kospi surcoreano, el Shanghai Composite chino, el Nikkei japonés y el ASX australiano.
Esto pese a que el Fondo Monetario Internacional ha elevado su previsión de crecimiento para la economía mundial en 2023 hasta el 2,9%, debido entre otras cosas a la reapertura económica en China.
En este sentido, tanto el PMI manufacturero como el PMI servicios de enero de China se han situado por encima de 50 (nivel que marca el límite entre contracción y expansión) y han superado expectativas. El primero ha quedado en 50,1 desde 47,0 y frente a la estimación de 49,8, y el segundo en 54,4 desde 41,6 y ante la previsión de 52,0.
Además, en Japón se ha publicado la producción industrial de diciembre, que igualmente ha salido mejor de lo previsto (-0,1% frente a -1,2%, aunque cae desde 0,2%). Por su parte, las ventas al por menor han superado expectativas, con una subida en diciembre del 3,8%; y la tasa de desempleo nipona se ha mantenido estable en el 2,5%.
En Corea del Sur, Samsung Electronics, uno de los pesos pesados del Kospi, ha bajado un 3,6% después de que su beneficio operativo en el cuarto trimestre se desplomara un 69% interanual, en medio de la recesión de la industria de semiconductores
En otros mercados, el petróleo West Texas baja un 0,5% ($77,50) y el Brent cede un 0,4% ($84,65). Por su parte, el euro se deprecia un 0,02% ($1,0841), y la onza de oro cede un 0,4% ($1.914). Además, la rentabilidad del bono americano a 10 años cae al 3,53% y el bitcoin rebota un 0,6% ($22.847).