Las bolsas de la región Asia-Pacífico han acabado este miércoles con signo mixto. Lo han hecho al haberse reavivado los temores a la crisis bancaria en Estados Unidos, después de que First Republic presentase sus resultados del primer trimestre y confirmase la salida de más de 100.000 millones en depósitos, lo que provocó el desplome de sus acciones.
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Los inversores también han estado atentos a las cifras de inflación de Australia del primer trimestre de 2023. Los precios se ralentizaron hasta el 7% interanual, por debajo del máximo de 23 años del 7,8% registrado el trimestre anterior. La oficina de estadística australiana ha detallado que la mayor contribución fueron los costes del gas y los combustibles domésticos, que aumentaron un 14,3%, así como los costes de la educación terciaria y los viajes de vacaciones nacionales, que aumentaron un 9,7% y un 4,7% respectivamente.
Tras conocer estas cifras, el S&P/ASX 200 ha bajado ligeramente, para cerrar en 7.316,3 puntos. En Japón, por su parte, el Nikkei 225 ha caído un 0,71% y ha terminado la jornada instalado en los 28.416,47 puntos, mientras que el Topix se ha dejado un 0,89% hasta los en 2.023,9 enteros.
En Corea del Sur, el Kospi ha perdido un 0,19% y el Kosdaq, un 0,98%, después de que el índice de confianza de los consumidores de abril subiera a 95,1 puntos, frente a los 92 de marzo. En un comunicado, el Banco de Corea ha indicado que la opinión de los consumidores sobre el nivel de vida actual era cuatro puntos superior a la de marzo (87), y que la relativa a las perspectivas futuras era tres puntos superior a la del mes anterior (90).
El índice Hang Seng de Hong Kong, sin embargo, ha subido un 0,86%, mientras que el Hang Seng Tech ha avanzado un 1,55%. Los mercados de la China continental también han registrado alzas, con el Shenzhen Component subiendo un 0,5% y el Shanghai Composite, un 0,11%.
