¿Cuánto más durará el castigo a la bolsa? Esa pregunta planea sobre los mercados desde hace ya tiempo, y aunque algunos crean que lo peor ya ha pasado, podría no ser así. De hecho, Bank of America (BofA) ha alertado de que la renta variable aún no ha tocado fondo, y no lo hará hasta que el ciclo macroeconómico "llegue a su punto más bajo". Los estrategas del banco estiman que eso es algo que puede pasar para finales de año o principios de 2023.
"La renta variable tocará fondo cuando el ciclo macroeconómico llegue a su punto más bajo", dicen los economistas del banco estadounidense en uno de sus últimos informes. De hecho, creen que el crecimiento de EEUU se reducirá en el cuarto trimestre, mientras que estiman que un cada vez más posible corte del gas ruso hará que el crecimiento de la zona euro toque fondo en el primer trimestre del próximo año.
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"Esperen una capitulación antes de volver a comprar acciones"Tal y como explican, el punto más bajo del ciclo macroeconómico "traerá la próxima oportunidad de compra significativa" en los mercados bursátiles. Recuerdan desde BofA que la renta variable europea "ha caído un 17% desde su máximo histórico de enero, convirtiéndose en el peor comienzo de año desde 2008", lastrada por una combinación de debilitamiento del impulso del crecimiento mundial y un repunte de los tipos de descuento.
"Esperamos un nuevo debilitamiento del impulso del crecimiento, en consonancia con la previsión de nuestros economistas de una recesión en EEUU este año, que probablemente seguirá pesando sobre los precios de los activos de riesgo", destacan estos analistas, que creen que eso "prepara a los inversores para la próxima gran oportunidad de compra, dado que el mejor momento para ser positivo en la renta variable es cuando los PMI están deprimidos y empiezan a repuntar".
Por tanto, sus previsiones sugieren que los inversores "deberían mantenerse cautos a corto plazo, pero prepararse para volverse positivos una vez que el ciclo macro cambie de rumbo". Y esto ocurrirá, como muy tarde, a principios de 2023. De esta forma, "los mercados podrían pasar otros dos trimestres de 'macroinvierno', es decir, de caída de los precios de los activos a causa del debilitamiento del entorno macroeconómico, antes de obtener el alivio de una inflexión positiva en el impulso del crecimiento".
Y es que BofA espera que el ciclo macroeconómico de EEUU toque fondo en el cuarto trimestre de este año, con un crecimiento intertrimestral del PIB anualizado del -2%, seguido de una mejora hasta el +1% en el segundo trimestre del próximo año. "Dado que los PMI suelen moverse en línea con el crecimiento trimestral anualizado del PIB, esto apunta a un posible estancamiento de los PMI a finales de año".
Además, el banco estadounidense apunta que el riesgo de que se interrumpan los suministros de gas ruso a Europa es "otro posible catalizador de un crecimiento más débil", y los economistas de la entidad creen que este escenario "es casi tan probable como su caso base más benigno". Así, remarcan que "si el gas ruso se interrumpe, el principal lastre para el crecimiento se producirá probablemente en el primer trimestre del próximo año".
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"Todavía no hemos visto el verdadero fondo de la renta variable"Pasado ese momento, será el momento de lanzarse de cabeza a por la renta variable. Y mientras tanto, BofA aconseja a los inversores ser prudentes. "Seguimos neutrales en la renta variable europea, sobreponderando los productos básicos e infraponderando los bancos", remarcan los estrategas del banco en el mencionado informe, en el que explican que en un escenario de recesión cabría esperar "una caída adicional del 11% para la renta variable europea".
Siguen infraponderando los bancos, los automóviles y las acciones de valor frente a las de crecimiento, que "tienen margen para un rendimiento inferior del 20%, el 15% y el 11% en un escenario de recesión, respectivamente". Y entre los valores defensivos, sobreponderan alimentos y bebidas, bienes personales y domésticos y servicios públicos, ya que esperan que "tengan un rendimiento superior al 12%-15% en un escenario de recesión".
Los expertos de BofA han decidido también elevar el sector inmobiliario de neutral a la sobreponderar "tras una infravaloración de más del 20% en los últimos meses, ya que el sector se beneficiará si los rendimientos de los bonos disminuyen a medida que la atención de los bancos centrales se desplaza de la preocupación por la inflación a la del crecimiento".