Vuelve la Edad del Cobre. La crisis del coronavirus está siendo un terremoto para los mercados que, contra todo pronóstico y entre un aluvión de preocupantes datos macro, puede pavimentar el rally del metal rojo. Y la última llamada para subirse a ese tren ya está aquí.
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Lo dicen los expertos de Eurasia Group. La firma cree que, a partir de ahora, los Gobiernos doblarán su inversión lo que, a su vez, impulsará la demanda de cobre en todo el mundo.
Este rojizo metal es históricamente considerado un termómetro de la economía mundial y ha sido uno de los valores más golpeados por la pandemia. Hasta ahora.
"Los colosales programas de estímulos para una transición verde y digital, especialmente en Asia y Europa, crearán las condiciones para un auge en la demanda del cobre: coches eléctricos, redes 5G, energías renovables... todas requieren una gran cantidad de este material", asegura Eurasia en su último informe.
La demanda de cobre puede caer hasta un 5% en 2020 por la pandemia. Sin embargo, se espera que rebote un 4% en 2021, reconquistando casi sus niveles anteriores a la crisis en un tiempo récord gracias a esos programas gubernamentales, entre los que se incluye el del Gobierno de Pedro Sánchez.
Bank of America también ve con optimismo renovado al cobre. El banco de inversión estadounidense espera que sus precios reboten un 5,4% adicional este mismo 2020, hasta los 5,621 dólares. Para 2021, mantienen intactas sus previsiones en los 6,250 dólares. Su esperanza es justificada también por "los notables paquetes de estímulo fiscal" que estamos viendo y la previsión de que más países retomen sus compras de materias primas conforme pase la pandemia.
En Morgan Stanley también proyectan una rápida y afilada recuperación del rojizo material. Sus analistas anticipan que recupere pronto sus niveles pre-pandemia gracias a los estímulos globales y el fuerte gasto de China en infraestructuras anunciado recientemente.
LOS TRES EUROS, "UNA IMPORTANTE ZONA DE CONTROL"
El analista de Bolsamanía, J.M. Rodríguez, destaca que "lo interesante del cobre es que desde sus mínimos de marzo, en los 1,9695 dólares (que coincidieron con los de las propias bolsas) ha rebotado un 36%". Todo está dispuesto para que, en teoría, "vuelva al origen del movimiento en los máximos anuales (2,88 dólares)".
Rodríguez subraya también la relevancia de la zona de los tres euros para el cobre: "Fue soporte a finales de 2017, fue soporte en 2018 y ha sido resistencia en 2019, por lo que estamos ante una importante zona de control". Respecto a su parecido con las bolsas, el analista reconoce que "su gráfico es muy similar al de índices como el S&P y el Dax".
