El miembro del Comité Ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE) Benoit Coeuré ha reconocido que la autoridad monetaria debería "clarificar" más el calendario de subidas de los tipos de interés si las condiciones económicas lo "justifican".
En un discurso pronunciado este lunes en el Instituto Alemán de Investigación Económica (DIW, por sus siglas en alemán), Coeuré ha destacado que "durante años" la orientación futura se ha convertido en un instrumento "valioso y efectivo" para los bancos centrales. Por este motivo, esa orientación "debe ser más transparente" cuando las perspectivas de inflación tienen una "incertidumbre excepcional".
Aunque Coeuré ha explicado que, en el pasado, los bancos centrales no ofrecían ningún tipo de clarificación específica sobre cuándo y cómo realizarían las subidas de tipos de interés, en la actualidad podría ayudar al mercado. "Si las condiciones económicas lo justifican, podría darse el caso de que el Consejo de Gobierno vaya más allá del momento del anuncio para clarificar el ritmo al que se espera eliminar la adaptabilidad de la política monetaria", ha subrayado el banquero.
"Dada la complejidad de construir un espacio político multidimensional, una mayor clarificación de nuestras reacciones podría ayudar a los participantes del mercado y al público en general a anticipar mejor el ritmo de cambios de los tipos de interés", ha añadido.
En relación con los calendarios anticipados de subidas, como hace la Reserva Federal con su diagrama de puntos, Coeuré se ha mostrado en contra. Por ejemplo, ha asegurado que el sistema de la autoridad monetaria de Estados Unidos se centra en las visiones individuales en lugar de la opinión colectiva. "En el contexto de la zona euro, creo que los riesgos de publicar un pronóstico numérico preciso de la trayectoria futura de los tipos de interés probablemente superen a los beneficios", ha indicado.
Precisamente con respecto de la clarificación del ritmo de subidas, el BCE aseguró en su reunión de junio que los tipos de interés se mantendrían en su nivel actual "hasta al menos durante el verano de 2019".
Coeuré ha especificado que se comunicó de este modo porque, en los primeros meses de 2018, había crecido la incertidumbre a corto plazo. "Los mercados esperaban que el BCE realizara su primera subida un mes después de finalizar el programa de compras de activos", ha apuntado, algo que, en opinión del organismo, era una estimación muy temprana.