El Comité de Política Monetaria y Estabilidad Financiera del Banco Central de Noruega (Norges Bank) ha decidido "por unanimidad" aumentar la tasa de política monetaria un 0,25%, hasta el 4%, según ha confirmado este jueves en un comunicado. La decisión se ha situado en línea con lo previsto por el consenso de mercado.
Además, el organismo monetario ha anticipado que seguirá subiendo los intereses en su reunión de septiembre, ya que la inflación todavía no está bajo control.
"La inflación de los precios al consumidor ha disminuido, pero sigue siendo alta y claramente por encima de la meta. La inflación subyacente se ha mantenido elevada. El Comité evalúa que se necesita una tasa de política algo más alta para que la inflación vuelva a la meta", ha explicado la entidad en su comunicado.
"La trayectoria futura de los tipos dependerá de la evolución económica. Si la economía evoluciona como se prevé actualmente, la tasa de interés oficial aumentará aún más en septiembre", ha señalado la gobernadora, Ida Wolden Bache.
Sobre el estado de la economía noruega, la entidad ha explicado que "la evolución económica general ha estado en línea con las expectativas. La actividad en la economía noruega sigue siendo alta y el mercado laboral está ajustado. Al mismo tiempo, la tasa de política monetaria está teniendo un efecto restrictivo y las presiones en la economía están disminuyendo".
Por último, el Norges Bank ha indicado que si la divisa del país, la corona noruega, sigue más débil de lo esperado, o si persisten las presiones en la economía, "es posible que se necesite una tasa de política más alta que la señalada en junio para reducir la inflación".
Por el contrario, ha añadido que "si hay una desaceleración más pronunciada en la economía noruega o la inflación cae más rápidamente, la tasa de política puede ser más baja de lo previsto en junio".