Las tecnológicas siguen siendo la gran moda en bolsa. Este tipo de valores lleva meses y meses encandenando subidas y muchos auspician ya la explosión de una burbuja que comparan con la de las puntocom a principios de los 2000. La guerra comercial tampoco ayuda a calmar las incertidumbres del sector.
Apple (+4,3%) ha sido la última de las grandes empresas tecnológicas de la bolsa de Nueva York en presentar sus cuentas trimestrales y lo ha hecho este martes al cierre de Wall Street. La compañía creadora del iPhone ha informado de un beneficio por acción (bpa) de 2,18 dólares, por encima de lo esperado por los analistas que lo situaban en 2,10 dólares, pero lejos de los últimos años (2,34 dólares).
Pese a las caídas de las dos últimos jornadas, con el mercado pendiente de la Fed y su decisión sobre los tipos, en lo que va del año, el desempeño de los índices de Wall Street está siendo muy positivo, alcanzado máximos históricos. Así, el S&P 500, Dow Jones y el Nasdaq se han revalorizado un 20%, un 16% y un 26%, respectivamente. Ante esta situación, Goldman Sachs y Morgan Stanley, se muestran en desacuerdo sobre el futuro del S&P500. Mientras el primero le concede un alza del 24% para este ejercicio, el segundo le otorga una caída que le lleve a los 2.400 puntos.
O mucho cambian las cosas en agosto o el verano servirá para confirmar que el Ibex es el 'hermano pobre' de Europa, el único de todos los índices del Viejo Continente incapaz de rebotar desde los mínimos de junio. De hecho, tiene ese nivel -los 8.900 puntos - a un suspiro y todo apunta a que se va de cabeza a por él a poco que los bancos empeoren un poco más.
