SANTIAGO DE COMPOSTELA, 31 (EUROPA PRESS)
La sección segunda de la Audiencia Provincial de Lugo ha condenado a 23 años y diez meses de cárcel, así como a diez años de libertad vigilada, a un hombre que violó a su mujer, a la que exigía dinero para comprar droga y sometía "a continuos episodios de violencia".
El tribunal lo ha considerado autor de delitos de maltrato habitual, agresión sexual, lesiones leves y coacciones. Los jueces consideran acreditado que el imputado amenazaba a su mujer con hacerle daño a sus hijas, no dejarlas salir y "matarlos a todos".
En una ocasión agredió a su hija mayor, a la que llegó a arrancar un mechón de pelo, cuando trataba de defender a su madre. El sospechoso también ha sido penado con la prohibición de comunicarse y aproximarse a la víctima durante 26 años y, a sus hijas, durante cuatro y tres años, respectivamente.
En concreto, al respecto del primero de los hechos declarado probado es constitutivo de un delito de maltrato habitual, la sentencia recoge que "son contundentes y reiterados los testimonios que ponen de manifiesto la situación de maltrato y vituperación que venía sufriendo".
El segundo hecho probado es constitutivo de un delito de agresión sexual y sobre él el fallo establece que no hay "duda de ningún género", ya que el relato viene "avalado por los restos físicos que la violencia empleada por el procesado dejó sobre el cuerpo de la víctima".
El tercer hecho probado se refiere a un episodio que sucedió en casa de los suegros del procesado, en donde este les propinó "golpes" tanto a su suegro como a su cuñado (son delitos leves de lesiones).
El cuarto es constitutivo de un delito de agresión sexual, el quinto de uno de coacciones y el sexto de maltrato pues la niña sufrió una agresión.
La sentencia solo aprecia en la conducta del acusado la circunstancia agravante de parentesco al respecto de los delitos de agresión sexual, leve de lesiones y coacciones.