- Ya supera ya a Carl Lewis, que se colgó el oro olímpico en los 100 metros en dos ocasiones
- Remontó en los últimos metros
El atleta jamaicano Usain Bolt ha conquistado este domingo su tercera medalla de oro consecutiva en la prueba de 100 metros de los Juegos Olímpicos, después de ganar en Río de Janeiro con una marca de 9.81. Tras reinar tanto en Pekín 2008 como en Londres 2012, Bolt repitió hazaña en la ciudad brasileña, aunque se quedó lejos tanto de su récord mundial (9.58) como de su récord olímpico (9.63).
La medalla de plata fue para el estadounidense Justin Gatlin (9.89) y el bronce para el canadiense Andre De Grasse (9.91), que dejaron sin presea al jamaicano Yohan Blake, que fue cuarto con 9.93.
POR ENCIMA YA DEL MITO CARL LEWIS
Es el primer velocista de la historia capaz de colgarse el oro durante tres JJOO consecutivos en los 100 metros
El atleta jamaicano Usain Bolt se ha convertido en el primer velocista capaz de colgarse el oro durante tres Juegos Olímpicos consecutivos en la prueba de 100 metros. En el Estadio Olímpico de Río de Janeiro, todas las miradas volvían a centrarse en el corredor, quien a punto de cumplir 30 años quería reafirmarse en el trono de la velocidad mundial, ese al que subió hace ocho años en Pekín.
Y lo logró, elevando su mito por encima del de Carl Lewis, el otro atleta que había conquistado el hectómetro en dos Juegos Olímpicos consecutivos (Los Ángeles'84 y Seúl'88). El tercer oro seguido en la prueba más veloz del atletismo era terreno vedado (también en categoría femenina) hasta que lo ha pisoteado el jamaicano, el cual debutó en los juegos de Río por encima incluso de los 10 segundos.
SOLO CONOCE EL ORO
Para lograrlo, ni siquiera necesitó rendir cerca de sus mejores marcas, este astronómico récord mundial que registró en Berlín 2009 (9.58) ni la plusmarca olímpica de Londres (9.63), aunque sí tuvo que pelear ante un Justin Gatlin que empezó dominando y que se tuvo que conformar con la plata, a ocho centésimas del ganador. El bronce fue para el canadiense Andre De Grasse por delante del gran derrotado, Yohan Blake. Todo ello en una carrera que vino después de un nuevo récord mundial, el establecido por Van Niekerk en la final de los 400 metros de Río 2016.
Ese 9.81 de Bolt quizá supo a poco al público que abarrotaba el estadio, pero no al velocista, que lo celebró con la alegría desbordante que le caracteriza. No era para menos: su séptimo oro olímpico tras sus tripletes en Pekín y Londres. El de Trelawny jamás ha ganado una plata o un bronce olímpico. Solo oro. A partir de este martes seguirá buscando más en las pruebas de 200 y 4x100, en las que ya ha reinado dos veces.
Fuente: Twitter(@JodidoDaniii)