- El viceprimer ministro turco Veysi Kaynak ha proclamado la victoria del 'Sí', aunque ha reconocido que no ha obtenido tantos votos como esperaban
- El 'No' ha sido la opción más votada en las tres ciudades más grandes del país: Estambul, Ankara y Izmir
- La oposición turca anuncia que pedirá un recuento de hasta el 60% de los votos
El sistema presidencialista propuesto por el Jefe del Estado turco, Recep Tayyip Erdogan, se ha impuesto este domingo en el referéndum por un 51,35% de los votos, frente a la derrota del 'No', que ha obtenido un 48,65 de los apoyos, según resultados oficiales correspondientes al 99,34% del escrutinio. Aunque de manera ajustada, Turquía avala así la reforma constitucional que confiere una ampliación a las competencias al presidente, pero la oposición turca ya ha anunciado que pedirá un recuento de hasta el 60% de los votos. Los observadores de la OSCE y del Consejo de Europa también han levantado la alarma sobre la calidad democrática de la votación.
El viceprimer ministro turco Veysi Kaynak ha proclamado la victoria del 'Sí', aunque ha reconocido que no ha obtenido tantos votos como esperaban. "No hemos logrado la cantidad de síes que esperábamos", ha afirmado, según recoge la cadena británica BBC.
El viceprimer ministro turco Veysi Kaynak ha proclamado la victoria del 'Sí', aunque ha reconocido que no ha obtenido tantos votos como esperaban
El 'Sí' se ha impuesto principalmente en el interior de la península de Anatolia y la región del Mar Negro, bastiones del gubernamental Partido de la Justicia y Desarrollo (AKP). Mientras, el 'No' ha sido la opción más votada en las tres ciudades más grandes del país: Estambul, Ankara y Esmirna, así como en la parte europea de Turquía y en el sureste del país, de mayoría kurda. Por otra parte, la participación en el referéndum ha sido muy alta, del 86,7% del censo.
Los votos a favor de que Turquía pase de ser una república parlamentaria a una presidencialista han sumado 25 millones, 1,3 millones más que el 'no', según Erdogan.
LA OPOSICIÓN DUDA DE LA LEGITIMIDAD DEL RECUENTO
El resultado ha sido ya cuestionado por el Partido Republicano del Pueblo (CHP), en la oposición, que duda de la legitimidad del recuento por la decisión de la Comisión Superior Electoral (YSK) de aceptar votos sin el sello pertinente y ha anunciado que pedirá un recuento de hasta el 60 por ciento de los votos por irregularidades en la votación de este domingo.
La YSK ha publicado una nota en su página web horas antes del cierre de la votación en la que señala que aceptará votos sin el sello oficial a menos que se demuestre que son fraudulentos ya que ha recibido multitud de quejas denunciando que los funcionarios de la propia YSK no estampaban los sellos.
Por otra parte, según los observadores de la OSCE y del Consejo de Europa no cumplió con los estándares democráticos, debido sobre todo a la "falta de imparcialidad" en la campaña. Según informa la Cadena Ser, la jefa de la misión de la Organización para la Cooperación y Seguridad en Europa (OSCE), Tana de Zulueta, ha decalrado que "el campo de juego no estaba nivelado". "En general, el referendo no cumplió con las normas del Consejo de Europa", advirtió por su parte Cezar Florin Preda, líder del equipo de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa.
El referéndum supone la culminación de un proceso que Erdogan tenía en mente desde prácticamente cuando llegó al poder en 2003 al frente del Partido Justicia y Desarrollo (AKP) y para el que dio el primer paso importante al presentarse y ganar las primeras elecciones presidenciales directas en el país, celebradas en agosto de 2014.
El principal cambio que plantea la reforma constitucional es la supresión de la figura de primer ministro para la instauración de un sistema presidencial
Desde entonces, el cambio al sistema presidencial en Turquía ha sido la meta a alcanzar y de hecho fue uno de los temas clave de las elecciones parlamentarias de junio de 2015. Sin embargo, el AKP no logró la mayoría suficiente para poder enmendar la Constitución, lo que finalmente forzó la celebración de nuevas elecciones en noviembre de ese mismo año.
¿EN QUE CONSISTE LA REFORMA?
El principal cambio que plantea la reforma constitucional es la supresión de la figura de primer ministro para la instauración de un sistema presidencial en el que el presidente es a la vez jefe de Estado y de Gobierno. Además, Erdogan tendrá la posibilidad de gobernar hasta 2029, dado que la nueva Constitución no se aplicaría hasta los próximos comicios en 2019 y tendría opción a dos mandatos, recoge Europa Press.
Entre las nuevas competencias que tendrá el nuevo presidente figurará la designación y destitución de altos cargos sin necesidad del visto bueno parlamentario, además de la potestad de emitir decretos con fuerza de ley sobre distintas cuestiones sociales, económicas e incluso políticas.
Además, y rompiendo con la tradición constitucional hasta la fecha, el presidente podrá ser miembro e incluso líder de un partido político. Para poder convertirse en jefe de Estado en agosto de 2014, Erdogan renunció a ser miembro del AKP, si bien nunca ha dejado de ser el punto de referencia del partido y una figura onmipresente.
Pero quizá, el apartado que más preocupa a los grupos de defensa de los Derechos Humanos es el relativo al creciente poder que el presidente tendrá sobre el sistema judicial, algo que ya habían venido denunciando en los últimos años y que se agudizó a raíz de la intentona golpista, con la purga de numerosos magistrados. Erdogan podrá designar a más integrantes del Alto Consejo de Jueces y Fiscales (HSYK, por sus siglas en turco), el órgano que regula la profesión judicial en el país y asigna los puestos, y del Tribunal Constitucional, encargado de interpretar la Carta Magna y juzgar los delitos cometidos por altos cargos.
El principal argumento esgrimido por Erdogan y el AKP en los últimos años a favor del sistema presidencial ha sido que Turquía necesita estabilidad, entre otras cosas porque tiene un conflicto abierto en el sur con los separatistas kurdos, y la dicotomía entre presidente y primer ministro impedía la buena gobernanza. Sin embargo, con el sistema que se quiere imponer cabe la posibilidad de que en un futuro el país pueda encontrarse gobernado por un presidente de un determinado partido y un Parlamento encabezado por otra formación política, con las dificultades que ello podría acarrear.
ERDOGAN PIDE RESPETAR EL RESULTADO
Los cambios aprobados entrarán en vigor en 2019, al celebrarse las próximas elecciones generales
Erdogan, ha realizado una ronda de llamadas telefónicas con distintos líderes políticos turcos y en particular ha felicitado al primer ministro, Binali Yildirim, y al líder del nacionalista Partido Movimiento Nacionalista (MHP), Devlet Bahceli, también favorable al 'Sí', para destacar que los resultados están "claros".
Según fuentes de la Presidencia, Erdogan ha trasladado a los dirigentes políticos su gratitud a la nación por mostrar su voluntad en las urnas.
"Hoy Turquía ha tomado una decisión histórica en un debate que dura 200 años y que es un cambio muy serio en nuestro sistema administrativo", ha destacado Erdogan, que ha señalado que los cambios aprobados entrarán en vigor en 2019, al celebrarse las próximas elecciones generales y presidenciales y ha señalado que "hasta entonces, todo el mundo tiene tiempo de prepararse".
Además, ha ha pedido que todos, incluidos los países aliados, respeten el resultado del referéndum constitucional. "Es siempre difícil defender un cambio, y fácil mantener el status quo, pero gracias ha Dios hemos tenido éxito. Solo se reforman 18 artículos (de la Carta Magna) pero los cambios serán muy profundos", ha anunciado.
LA UE PIDE "AMPLIO CONSENSO" ANTE EL "AJUSTADO" RESULTADO"
Los máximos responsables de las instituciones de la UE han hecho un llamamiento a lograr "el más amplio consenso posible" tras lo ajustado del resultado del referéndum de reforma constitucional celebrado este domingo en Turquía y que permite por un estrecho margen la transformación del sistema político turco en una república presidencialista.
"Ante lo ajustado del resultado del referéndum y el alcance de las implicaciones de las enmiendas constitucionales, pedimos también a las autoridades turcas que busquen el consenso nacional más amplio posible en su aplicación", ha señalado un comunicado firmado por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, la Alta Representante de la Política Exterior y de Seguridad de la UE, Federica Mogherini, y el comisario de Política de Vecindad y Ampliación, Johannes Hahn.