Donald Trump se está planteando acabar con uno de los derechos más fuertemente implantados en EEUU. En concreto, el presidente ha dicho estar valorando la posibilidad de eliminar el derecho de ciudadanía por nacimiento. Es decir, que los hijos de inmigrantes nacidos en el país ya no serán ciudadanos por derecho.
Es la última de las propuestas de la Administración Trump para acabar con la inmigración ilegal. "Estamos viendo eso muy seriamente, la ciudadanía por nacimiento. Cruzas la frontera, tienes un bebé, felicitaciones, el bebé ahora es ciudadano de los Estados Unidos... Es francamente ridículo", ha dicho el presidente estadounidenses a los periodistas en rueda de prensa en la Casa Blanca, según recoge Reuters.
Trump ha hecho de la lucha contra la inmigración irregular un pilar central de su mandato y de su campaña de reelección, que ya está en marcha (las elecciones se celebrarán en noviembre de 2020), pero muchos de los cambios radicales en la normativa y en las órdenes ejecutivas que ha planteado han sido bloqueados por los tribunales. Como quizá pase también con su última propuesta, la de crear una ley que permita mantener detenidos a los migrantes.
De momento, recordar que la propuesta de acabar con el derecho de ciudadanía por nacimiento no es nueva. El republicano ya había comentado al sitio web de noticias Axios en octubre de 2018 que pondría fin a esta medida a través de una orden ejecutiva, aunque de momento no lo ha hecho.
Pero los expertos han dicho que tal medida sería contraria a la Constitución de EEUU. En concreto, la 14ª Enmienda de la Constitución, aprobada después de la Guerra Civil para asegurar que los estadounidenses negros tuvieran plenos derechos de ciudadanía, otorgó la ciudadanía a "todas las personas nacidas o naturalizadas en los Estados Unidos".
Desde entonces, esta Enmienda se ha usado para otorgar la ciudadanía a la mayoría de las personas nacidas en el país, sean o no sus padres ciudadanos estadounidenses, y vivan o no legalmente en Estados Unidos.
