La alianza izquierdista de Francia planea un gasto público de 200.000 millones de euros para sus prioridades durante los próximos cinco años si gana las elecciones anticipadas, mientras busca revertir las reformas laborales y de pensiones del presidente Emmanuel Macron e impulsar el crecimiento.
Jean-Luc Mélenchon, líder de la Francia Insumisa, ha expresado que espera que el Estado obtenga ingresos de 230.000 millones de euros durante el mismo período gracias a un "impulso de la actividad”.
"En cada elección, el programa de la izquierda equivale a la ruina del país", dijo al diario 'Le Figaro' en una entrevista . “El gasto social crea bienestar, lo que permite el consumo, lo que produce empleos e ingresos fiscales”.
El partido ha mencionado también su intención de revertir la reforma de las pensiones de Macron, restablecer el derecho a jubilarse a los 60 años, aumentar el salario mínimo e imponer un impuesto adicional a las ganancias de ciertas empresas industriales, entre otras medidas.
El propio Mélenchon, que no es candidato a ningún escaño en la Asamblea Nacional, ha mostrado su disposición a ser primer ministro.