El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se habría adelantado ligeramente a su principal rival en las elecciones celebradas este martes en Israel, el exjefe del Ejército Benny Gantz, después de que el Likud y Azul y Blanco hayan obtenido el 28,09 y el 26,63 por ciento respectivamente, según los resultados preliminares con el 35% de los votos escrutados.
En tercer lugar se encuentra Shas, con 8,67 de los apoyos, seguido de Judaísmo Unido de la Torá, que cuenta por el momento con un 8,12 por ciento de los respaldos en un lento recuento que parece seguir la tendencia de las encuestas a pie de urna. En quinto lugar está Yisrael Beitenu, partido que encabeza el exministro de Defensa Avigdor Lieberman, al que los sondeos daban otra vez un papel fundamental de cara a la formación de un Gobierno.
Los sondeos apuntan que el Likud de Netanyahu se haría con cerca de 32 escaños --lejos de los 61 de la mayoría absoluta--, si bien su alianza con partidos ultraortodoxos y derechistas le permitiría rondar ese umbral.
Las encuestan ya auguraban prácticamente un empate técnico entre el Likud y Azul y Blanco, como ya ocurrió tras las elecciones del pasado mes de abril, cuando obtuvieron el mismo número de escaños. Para poder formar gobierno, deberán conseguir el apoyo de 61 de los 120 diputados que conforman la Knesset, el Parlamento israelí.
Tras aquellos comicios, Netanyahu no consiguió forjar una coalición de gobierno a pesar de que el bloque de derecha y religioso era el mayor en la cámara, por lo que optó por disolver el Parlamento y volver a sacar las urnas en lugar de permitir que otro candidato intentara formar gobierno.
El presidente israelí, Reuven Rivlin, ha asegurado este martes que está decidido a impedir que esto ocurra de nuevo. "Haré todo lo posible conforme a la ley y a los poderes garantizados por mi cargo para que Israel tenga un gobierno electo tan pronto como sea posible y que evitemos otra campaña electoral", ha declarado, según informa DPA.
AUMENTA LA PARTICIPACIÓN
Por su parte, el Comité Central Electoral ha indicado que a las 20.00 horas (las 19.00 horas en la España peninsular e Islas Baleares) la participación era del 63,7 por ciento, 2,4 puntos porcentuales superior a la registrada a esa hora en abril.
Las elecciones son una repetición de las celebradas en abril, después de que Netanyahu no lograra acordar un Ejecutivo y optara por convocar nuevas elecciones antes de permitir al presidente pasar el testigo a otra persona para intentar formar Gobierno.
En Israel, la población vota a una lista de candidatos al Parlamento, en el que posteriormente se forjan las alianzas. Hasta la fecha ningún partido ha logrado una mayoría absoluta, lo que hace de la etapa postelectoral un elemento clave del proceso.
Rivlin ha asegurado este martes que está decidido a impedir que esto ocurra de nuevo. "Haré todo lo posible conforme a la ley y a los poderes garantizados por mi cargo para que Israel tenga un gobierno electo tan pronto como sea posible y que evitemos otra "Haré todo lo posible conforme a la ley y a los poderes garantizados por mi cargo para que Israel tenga un gobierno electo tan pronto como sea posible y que evitemos otra