La expulsión masiva de corresponsales extranjeros arroja dudas sobre China y el coronavirus, según un informe muy crítico con Pekín publicado por Reporteros Sin Fronteras (RSF). "La expulsión masiva de corresponsales extranjeros paraliza aún más la libertad de información en China", afirma RSF.
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La OMS está "profundamente preocupada" por la expansión global del coronavirusEl organismo exige a las autoridades chinas que pongan fin al hostigamiento a los periodistas extranjeros y sus fuentes, prácticas que están aumentando, según un informe publicado esta semana por el Club de Corresponsales Extranjeros de China (Foreign Correspondents' Club of China/FCCC).
En este sentido, RFS insta al régimen a revertir su decisión de expulsar el viernes a 13 corresponsales extranjeros de Estados Unidos e insiste en que los informes independientes son, ahora más que nunca, críticos en la lucha contra el coronavirus.
Al menos 13 corresponsales extranjeros americanos se han visto obligados a abandonar China "precisamente en el momento en que Beijing afirma que ha frenado la epidemia de Covid-19 dentro de sus fronteras", afirma RFS.
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Boris Johnson anuncia que ha dado positivo por coronavirusEl 18 de marzo, el régimen anunció que los periodistas estadounidenses que trabajan en China para The New York Times, The Washington Post y The Wall Street Journal tendrían que abandonar el país dentro de 10 días en una medida que significa una "represalia" contra las medidas de Washington para limitar la influencia de los medios de propaganda de China en EEUU.
"Aunque China promete que la epidemia está bajo control, solo los medios independientes pueden confirmar que este es realmente el caso", ha señalado Cédric Alviani, jefe de la Oficina de RSF de Asia Oriental. "Los periodistas seleccionados proporcionaron algunos de los primeros y más precisos informes sobre la epidemia de coronavirus y su partida afectará a la posibilidad de que la comunidad internacional siga la evolución de la crisis en China", añade Alviani.
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Holanda dice que Italia y España admiten a personas "demasiado viejas" en las UCIs"La epidemia actual de coronavirus muestra que la comunidad internacional no puede prescindir de una cobertura de noticias confiable e independiente. Instamos a Beijing a que ponga fin de inmediato a esta política de acoso inaceptable y peligrosa", concluye el representante de RFS.
Las autoridades dieron otro ejemplo de este tipo de presión el 19 de febrero, cuando el Ministerio de Relaciones Exteriores chino anunció la expulsión de tres reporteros del Wall Street Journal porque su periódico había publicado un artículo de opinión crítico sobre el manejo de China de la epidemia de coronavirus que contenía lenguaje "racialmente discriminatorio" y cuestionaba la estabilidad de su economía.
China ocupa el puesto 177 de 180 países en el Índice Mundial de Libertad de Prensa 2019 de RSF y su gestión de la crisis del coronavirus ha sido puesta en duda al comunicar en los últimos días que no se había detectado un solo caso local de coronavirus (en un país donde viven más de 1.400 millones de personas) y que todos los nuevos casos son importados.
Como dice un elocuente artículo de 'ForeingPolicy', en el que critica la censura de China pero también las prácticas de otros países como Irán y Estados Unidos, "la verdad se ha convertido en una víctima del coronavirus".