El lider norcoreano Kim Jong-un presidió este domingo el desfile militar que conmemora el 70 aniversario de la fundación de Corea del Norte y en el que, al contrario que en años anteriores, no se exhibieron los misiles balísticos intercontinentales, teóricamente capaces de alcanzar Estados Unidos cargados con cabezas nucleares.
Se trata del primer desfile militar en el hermético estado asiático desde la cumbre celebrada Singapur en junio entre el mandatario coreano y el presidente estadounidense Donald Trump en la que se avanzó en un programa de desarme nuclear de Corea del Norte.
Durante la celebración no se hizo ninguna mención al programa nuclear coreano y los discursos públicos evitaron emplear el habitual tono belicoso que ha caracterizado históricamente el lenguaje oficial del régimen, en lo que podría ser un cambo de táctica diplomática, en busca de un mayor entendimiento con Washington.
El lider norcoreano Kim Jong-un anunció en marzo su intención de desnuclearizar el país y Trump confirmó, tras la reunión de junio, que Corea del Norte ya estaba "destruyendo sus principales centros de pruebas nucleares", aunque Estados Unidos sigue imponiendo sanciones al país asiático.
