Angela Merkel ha asegurado este lunes que está sobre la mesa alagar las nuevas restricciones para poner freno a la pandemia. Entre ellas se incluyen el cierre de restaurantes y cines y en un primer momento se establecieron durante un mes.
A pesar de que es una posibilidad real, la canciller alemana es optimista con las restricciones actuales y espera que se pueda tener un diciembre "soportable" aunque "por supuesto" con las medidas de higiene y distanciamiento en vigor.
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El gobierno alemán anunció el pasado miércoles el cierre de bares, restaurantes y el ocio cultura, donde se incluyen teatros, cines y gimnasios. Una medida que se ha hecho efectiva este lunes.
El país germano registra actualmente una tasa por encima de 120 contagios por cada 100.000 personas. Una cifra que Merkel quiere poner por debajo de 50.
Desde este lunes y hasta finales de mes restaurantes y bares, cines y teatros, gimnasios y piscinas permanecerán cerrados en toda Alemania para frenar la propagación de la pandemia. El comercio y los colegios, por su parte, permanecerán abiertos.
Asimismo, los viajes quedan prohibidos, se recomienda el teletrabajo siempre que sea posible y se limitan las reuniones privadas a un máximo de diez personas de hasta dos hogares.
"Nos acercamos cada vez más a los límites humanos y estructurales del sistema sanitario. Eso no lo puede permitir ningún Gobierno, no el Gobierno alemán y yo no lo quiero permitir", ha matizado Merkel, que ha recordado que la pandemia es "la mayor prueba de esfuerzo desde la fundación de la República Federal Alemana".
