Al menos 36 personas han fallecido y 85 han resultado heridas, 25 de ellas de gravedad, en el choque de un tren de pasajeros con uno de mercancías en la noche de este miércoles en Grecia, en la localidad de Tempe, en el centro del país. Las primeras investigaciones apuntan a un error humano que llevó al maquinista del tren de pasajeros a desviarse hacía las vías del tren comercial. Sin embargo, también existe la posibilidad de que uno de los trenes descarrilara e invadiera la vía en la que chocaron, como señaló SKAI TV.
Entre ambos trenes se encontraban 350 viajeros y 20 empleados, como ha detallado Helenic Train, la empresa de ferrocarriles. Tras el choque, varios vagones descarrilaron y tres se incendiaron. Muchos de los heridos sufren graves quemaduras, ya que, como ha explicado el alcalde de Tempe, Giorgos Manoli, los vagones alcanzaron los 1.500 grados centígrados.
El portavoz del servicio de bomberos, Vassilis Vathrakogiannis, ha declarado a la emisora griega ERT que hasta el momento "se han recuperado 32 cuerpos", según recoge RTVE. Sin embargo, se espera que el número de fallecidos continúe aumentando, ya que en el tercer vagón de pasajeros se cree que puede haber aún decenas de cadáveres.
Por su parte, el gobernador regional de Tesalia, Kostas Agorastos, ha informado de que "los vagones uno y dos no existen. Debido a la gravedad de la colisión, fueron arrancados", recoge Europa Press.
Tras el accidente, el jefe de estación de trenes de Larisa, el representante de la compañía Hellenic Train, que operaba ambos trenes, y otro funcionario han sido llevado a la comisaría de Larisa. Además, se han movilizado los bomberos, la policía y el ejército para ayudar en las tareas de rescate.
Las 250 personas que han sobrevivido a la colisión y presentan heridas leves han sido desplazadas hasta Salónica, a 130 kilómetros del lugar de accidente.
Por el momento, las autoridades han declarado tres días de luto oficial a nivel nacional. En este periodo, todas las banderas ondearán a media asta en todos los edificios públicos. Además, se han suspendido todas las celebraciones públicas programadas.