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El inversor ruso Mikhail Fridman, máximo accionista de DIA

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Especulando sin piedad. Eso es lo que está haciendo el banco suizo UBS con las acciones de DIA. Tras confirmar que controlaba casi un 6% del capital de la cadena de supermercados, la entidad ha informado ahora que tan sólo controla un porcentaje del 0,293%.

Un cambio de participación muy relevante que se ha producido en tan sólo un par de sesiones bursátiles y que, como ya ha informado Bolsamanía en los últimos días, se ha convertido en algo habitual desde finales de agosto.

Y todo ello mientras el valor cotiza por debajo de 2 euros por acción y mira de reojo a sus mínimos históricos, marcados en agosto en 1,80 euros por título.

Desde el pasado 29 de agosto, UBS ha comprado y vendido el 5% o el 6% del capital de la cadena de supermercados hasta en dos ocasiones, en un movimiento totalmente inusual en el capital de una empresa española cotizada y que al parecer está reportando grandes beneficios a los traders del banco suizo, de ahí su repetición cortoplacista.

UBS ha explicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que realiza estas operaciones mediante acciones e instrumentos derivados denominados 'equity swap'. Y que dichas transacciones no se realizan en el mercado bursátil minorista, sino que son efectuadas en el mercado paralelo OTC ('over the counter').

En el argot bursátil, son operaciones que se realizan 'fuera de mercado', en un entorno paralelo donde sólo operan las 'manos fuertes' como UBS. Además, el banco señala que sus transacciones pertenecen al 'Trading Book' (Diario de Operaciones) de la entidad, especialista en este tipo de operaciones financieras.

“La obligación de informar sobre las transacciones en el mercado OTC se produce porque la participación en el 'Trading Book' ha bajado del 5% y por tanto está exenta de presentarse”, señala UBS en el último documento enviado al regulador, fechado el pasado 30 de agosto y que es similar al enviado el pasado 31 de agosto.

Las acciones de DIA acumulan un desplome del 28% en el último trimestre y las posiciones bajistas sobre el valor han repuntado a principios de septiembre hasta el 21,53% del capital desde el 20,85% anterior. La volatilidad de sus acciones ha abierto el apetito de los traders como los de UBS, que han tomado al valor como una de sus apuestas favoritas para especular a corto plazo.

Recientemente, los analistas de Kepler han destacado la posibilidad de que Mikhail Fridman, el inversor ruso que controla el 25% del capital y que acumula minusvalías millonarias en su participación, puede lanzar una OPA sobre el 100% para excluir a la cadena de supermercados de bolsa. Mientras tanto, los especuladores siguen haciendo su 'agosto' con el valor.

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