Una año después de aprobarse la Ley de Arrendamientos Urbanos, el Gobierno y el Ministerio de Formento estudian introducir nuevas mejoras para agilizar los desahucios de los inquilinos morosos.
En la actualidad los procedimientos de desahucio pueden durar hasta 14 meses
Aunque esa última reforma ya incluía avances para agilizar los desahucios, lo cierto es que los tiempos no se cumplen en todos los casos. Según destaca Cinco Días, el texto contempla que si el inquilino no abona su mensualidad en los 10 primeros días que le corresponde, en los diez siguientes podría iniciarse el proceso de desahucio. Aún así, los procesos judiciales suelen retrasar la expulsión del inquilino y puede llegar a durar hasta 14 meses.
De hecho, el diario indica que fuentes del sector explican que quienes no tienen intención de pagar acuden a todos los mecanismos que contempla la ley actual para prolongar su estancia en la vivienda y uno de los más utilizados es el arbitraje.
MÁS RAPIDEZ PERO SIN INCENTIVOS
El objetivo del Gobierno es recortar esos plazos de desahucio para hacer el proceso más rápido, aún así, han descartado por el momento introducir nuevos incentivos fiscales para promover el alquiler tal y como ya recogía la reforma fiscal.
Pese a ello, el Ejecutivo persigue modificar la balanza de tal manera que el alquiler pese más en España que la vivienda en propiedad y por ello quiere proteger a los dueños de los inmuebles ante los impagos con la reforma de la ley.
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