La búsqueda de dividendos generosos y perdurables en el tiempo es una estrategia que está ganando relevancia entre los inversores. Sin embargo, no siempre es fácil encontrar sólidos pagadores de dividendos en el mercado doméstico. Un obstáculo que se puede superar con fondos globales, tal y como resaltan los expertos de Morningstar.
“Los enfoques globales permiten a los gestores de carteras apostar por un variado número de sectores, lo que facilita alcanzar los niveles deseados de rentabilidad”, comentan estos analistas; quienes recuerdan, además, la buena evolución que han tenido en los últimos tiempos los índices conformados por compañías de elevado dividendo.
Y con todas estas premisas en mente, la citada firma selecciona tres fondos cotizados (ETF) en las bolsas europeas con una máxima calificación y un universo de inversión global.
FIDELITY GLOBAL QUALITY INCOME
Así, en primer lugar mencionan el Fidelity Global Quality Income (FGQI), un producto financiero al que asignan cinco estrellas (máxima puntuación e igual que a los otros dos) y del que destacan su rentabilidad ajustada al riesgo y sus menores costes.
Según detallan, se trata de un vehículo de inversión diseñado para replicar un índice de empresas de gran y mediana capitalización de países desarrollados que tienen una elevada rentabilidad por dividendo y son de alta calidad. Esta última característica se define por métricas como el margen de flujo de caja libre, el rendimiento del capital invertido y la estabilidad del flujo de caja.
“En esencia, es un ETF orientado a ahorradores que persiguen un flujo de dividendos en su inversión en renta variable y, al mismo tiempo, desean tener una cartera global de empresas sólidas”, añaden.
Asimismo, Morningstar alaba la tendencia de este fondo hacia acciones más líquidas, “un factor que facilita la negociación cuando los mercados están a la baja”; y reseña que, en el plano sectorial, está sobreponderado en tecnología y bienes de consumo cíclico.
ISHARES MSCI WORLD QUALITY DIVIDEND ESG
El segundo nombre de esta lista es el iShares MSCI World Quality Dividend ESG (WQDV), nutrido igualmente por empresas mundiales reconocidas por su significativa retribución al socio y por contar con claras ventajas competitivas.
Este producto financiero se rige, además, por criterios medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG), dando prioridad a compañías con bajas emisiones de carbono.
Según los últimos datos disponibles, este fondo tiende a sobreponderar los grupos tecnológicos y farmacéuticos en una cartera compuesta por más de 230 títulos, pero que está bastante concentrada en los diez primeros.
VANGUARD FTSE ALL WORLD HIGH DIVIDEND YIELD
Finalmente, el tercer ETF elegido por Morningstar es el Vanguard FTSE All World High Dividend Yield (VHYD), el mayor en su categoría en términos de volumen de activos de los que cotizan en Europa.
En comparación con sus competidores, tal y como subrayan los citados economistas, este fondo es propenso a ostentar empresas más grandes, con una mayor orientación al valor y de más liquidez.
Por sectores, finanzas y energía son los que mayor ponderación tienen actualmente en su cartera, al tiempo que tecnología tiene una representación inferior a la media.
La cartera es amplia, con más de 1.800 valores y poco concentrada, con un peso de los diez primeros de solo el 13%.
