En un contexto en el que los tipos de interés de referencia seguirán estando por encima del que ofrecen de media los depósitos, el Banco de España estima que, en busca de una mayor remuneración, puede continuar el trasvase de ahorros hacia fondos de inversión y deuda pública.
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¿Queda gasolina en los depósitos antes de que el BCE empiece a bajar los tipos de interés?En base a las previsiones reflejadas en el Informe de Estabilidad Financiera de primavera del organismo, "persistiría cierto recorrido al alza en el coste de los depósitos bancarios de los bancos españoles, ya que, a pesar de las expectativas de moderación de los tipos de referencia para 2024, estos continuarían por encima del tipo medio de depósitos".
"En este contexto, además, puede proseguir la sustitución de depósitos a la vista por plazo, y el trasvase de depósitos bancarios hacia fondos de inversión y deuda pública en busca de una mejor remuneración", expresa el documento.
Como explican desde el Banco de España, "puede continuar el trasvase de fondos desde cuentas a la vista hacia depósitos a plazo, que ofrecen una mejor remuneración, si bien no pueden utilizarse para gestionar los flujos de caja de los clientes. Además, a pesar de la moderación esperada de los tipos de interés de referencia en 2024, estos se situarían todavía sensiblemente por encima del tipo medio de los depósitos en España -que se mantienen entre los más bajos de los principales países europeos-. Esto contribuiría a mantener el atractivo de la rentabilidad de opciones de ahorro alternativas, como la deuda pública de forma directa o indirecta vía fondos de inversión, o los seguros".
Según los datos de 2023, el peso de los depósitos a plazo de los hogares y sociedades no financieras aumentó en 7 puntos porcentuales, pero sigue siendo inferior al observado antes del período de tipos de interés negativos (14,6% en diciembre de 2023 frente a 47,2% en 2014). En términos agregados, las cuentas a la vista seguían representando a diciembre de 2023 un 85,3% de los depósitos totales del sector privado no financiero.
Por su parte, el mayor crecimiento de los fondos de inversión desde 2022 en comparación con el del sector bancario refleja en parte un trasvase de algunos ahorradores hacia este sector, en un contexto de remuneración reducida de los depósitos bancarios.
Durante el año pasado, la remuneración de los depósitos de hogares en España aumentó, aunque su coste medio es todavía contenido. En diciembre de 2023, para el conjunto de las entidades, el tipo de interés medio pagado por los depósitos de los hogares alcanzó el 0,4%, frente al 0,1% observado un año antes.
Como señala el informe, el aumento de la remuneración de los depósitos en España fue generalizado entre entidades, aunque se observó una destacable heterogeneidad: "Las distribuciones de los tipos medios de los depósitos se desplazaron hacia la derecha, pero también se ensancharon. En el caso de los hogares, la distribución de los tipos aplicados por las distintas entidades se extendió en torno al 0,3%, con algunas entidades ofreciendo tipos sustancialmente más altos, por encima del 1%".
PÉRDIDA DE PODER ADQUISITIVO
Durante la última década, los españoles que han optado por los depósitos a plazo fijo o a la vista han sido testigos de cómo su poder adquisitivo se reducía hasta en un 25%. Así lo aseguran desde la plataforma Raisin. "Los datos revelan una verdad incómoda sobre los depósitos a la vista y a plazo fijo en España: no solo han ofrecido retornos insuficientes para contrarrestar la inflación, sino que han contribuido a una pérdida palpable del poder adquisitivo", dicen.
En concreto, calculan que, en los últimos cinco años, la tasa promedio de interés para los depósitos a plazo fijo fue de 1,59%, pero ajustada por inflación la capacidad de compra de esos ahorros se ha reducido al 83,56%. Para los depósitos a la vista, la situación es aún más crítica, con una erosión del poder adquisitivo que los lleva al 82,42%.
Al observar los últimos diez años, la tendencia de erosión del poder adquisitivo se acentúa. Los depósitos a plazo fijo han tenido un rendimiento promedio del 5,13%, pero ajustado por inflación el valor real de esos ahorros ha caído al 78,66%, lo que representa una reducción del 21% en su poder adquisitivo. En contraste, los depósitos a la vista han visto su valor ajustado por inflación disminuir hasta un 75,34%.
"Estos números subrayan cómo, con el tiempo, tanto los depósitos a plazo fijo como los depósitos a la vista han perdido gran parte de su valor en términos reales y no han sido suficientes para contrarrestar los efectos de la inflación", añaden.