El gasto con tarjeta ya supera, y con creces, al de antes de la pandemia. En noviembre, fue un 40% mayor que en el mismo mes de 2019, en línea con lo sucedido en octubre, mientras que si se compara con el penúltimo mes de 2020, el gasto aumentó un 49%. Destaca sobre todo el repunte de las transacciones no presenciales con tarjetas españolas.
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¿Tarjeta de crédito o de débito? Los bancos se inventan un híbrido para aprovechar el tirónDe hecho, la subida de las transacciones presenciales con tarjetas extranjeras (10%) y de las no presenciales con tarjetas españolas (130%) compensó el menor avance del consumo presencial con tarjetas españolas (28%) respecto a noviembre de 2020, según los datos recogidos por BBVA a partir de las transacciones con tarjetas emitidas por la entidad o en TPV del banco.
Aunque el aumento de las compras no presenciales con tarjetas extranjeras ganó tracción hasta el 82%, el canal presencial (44% interanual) fue el principal responsable de la aceleración del consumo.
Hay que destacar que noviembre contó con varias fechas dadas al consumo. La festividad del 1 de noviembre y los descuentos del Black Friday y el Cyber Monday impulsaron las compras con tarjetas españolas en la primera y cuarta semanas del mes. El gasto presencial con tarjetas extranjeras osciló en torno al 110% de los registros de noviembre de 2019, mientras que la recuperación de las no presenciales se detuvo.
La apertura de establecimientos comerciales y la utilización recurrente de la tarjeta como medio de pago explicaron, de nuevo, el incremento del gasto en noviembre. El importe medio de compra se mantuvo en 36 euros, un 9% menos que en el mismo mes de hace dos años.
La entidad señala que, a diferencia de lo sucedido desde el fin del estado de alarma (mayo de 2021), el comportamiento de la demanda de bienes fue más favorable que el de servicios en noviembre, sobre todo en la quincena previa al Black Friday. En consecuencia, su participación en el gasto aumentó dos puntos respecto a octubre, hasta el 40%.
Por sectores, otros servicios, ocio, alimentación, libros y prensa y restauración continuaron liderando el avance de las compras con tarjeta, mientras que belleza, moda y viajes se mantuvieron por debajo de los registros precrisis. La recuperación tan solo perdió impulso en restauración, alojamiento, belleza y moda. El crecimiento del gasto presencial fue mayor en otros servicios, alimentación y ocio. En el canal no presencial, sobresalieron otros servicios, que incluyen las plataformas de comercio electrónico y las suscripciones online, equipamiento del hogar y deportes. Moda y viajes continuaron por debajo de las cifras de 2019 en los dos canales.
El impacto del Black Friday se concentró en los sectores de otros servicios, equipamiento del hogar, deportes, alimentación y restauración. Respecto a 2020, el incremento de las compras fue mayor en las actividades de consumo social y las asociadas a desplazamientos, como restauración, belleza, alojamiento y viajes.
Por provincias, las transacciones presenciales con tarjeta superaron los niveles de 2019 en todas. Ávila, Segovia, Cádiz, Ourense, Sevilla y Córdoba lideraron el crecimiento, mientras que en Navarra, Araba, Bizkaia, Gipuzkoa, La Rioja e Illes Balears el ascenso no alcanzó el 15%. Igual que en octubre, el aumento de las compras con tarjetas españolas fue el principal responsable de que el gasto se situase por encima de las cifras de noviembre de 2019. Los incrementos más significativos se registraron en Ávila, Segovia, Cádiz, Ourense, Sevilla y Córdoba.
Las transacciones presenciales con tarjetas extranjeras excedieron los registros de 2019 en 39 provincias en noviembre. Lleida, Teruel, Ávila y Albacete encabezaron el avance del gasto, mientras que la debilidad del turismo urbano condicionó la recuperación en Toledo, Barcelona o Valladolid.
RETIRADAS DE EFECTIVO CON TARJETA
Por otro lado, por primera vez desde febrero de 2020, las retiradas de efectivo con tarjeta en noviembre rebasaron a las efectuadas en el mismo periodo de 2019 (2% frente al -2% en octubre). El peso de los reintegros en el total de operaciones se mantuvo en el 21%, cuatro y seis puntos menos que en el mismo periodo de 2019 y de 2020, respectivamente.
Las retiradas de efectivo fueron mayores que las realizadas en 2019 en 42 provincias. Destacaron Lugo, Ourense, Córdoba, Pontevedra, Teruel y Segovia, con avances superiores al 13%. Por el contrario, Ceuta, Melilla, Zaragoza y Madrid no alcanzaron el 95% del nivel de hace dos años.