Un año después, las negociaciones llegaron a buen puerto. Los Estados miembros de la Unión Europea (UE) acordaron este miércoles implantar un impuesto mínimo del 15% para gravar a multinacionales con una facturación superior a los 750 millones de euros anuales en todo el territorio comunitario.
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Es "poco probable" que el impuesto del 15% a las multinacionales "suponga una gran diferencia"Este acuerdo ha sido posible gracias a que Hungría levantó su veto a la normativa después de que Bruselas accediera a suavizar las sanciones contra el país magiar por vulnerar el Estado de derecho; asimismo, el Ejecutivo de Orbán ha aceptado el paquete de ayudas de 18.000 millones de euros para Ucrania. Cabe recordar que este tipo impositivo mínimo fue acordado a escala mundial por más de un centenar de países en el seno de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
“La Comisión (Europea) acoge con satisfacción el acuerdo unánime anunciado anoche por la presidencia checa del Consejo de la UE sobre la propuesta de directiva de la Comisión que garantiza un tipo impositivo efectivo mínimo para los grandes grupos multinacionales”, aseguró el Ejecutivo comunitario en una nota publicada tras la la reunión del Consejo Europeo. Asimismo, Bruselas detalla que estas normas “serán de aplicación a cualquier gran grupo, tanto nacional como internacional, con empresa matriz o filial situada en un Estado miembro de la UE”.
En la práctica, si el tipo efectivo mínimo no es aplicado por el país en el que esté establecida una filial, la normativa contempla que el Estado miembro en el que opere la sociedad matriz pueda aplicar un impuesto complementario. La Directiva comunitaria también prevé garantizar una recaudación efectiva cuando la empresa matriz esté situada fuera de territorio de la UE, en un país de baja tributación que no aplique normas equivalentes. Los Estados miembros deberán trasponer la nueva normativa a más tardar el 31 de diciembre de 2023.
Paolo Gentiloni, comisario europeo de Economía, ha celebrado el “triunfo de la equidad, diplomacia y multilateralismo” que supone el acuerdo alcanzado por los Veintisiete. “La Comisión Europea nunca ha renunciado a este acuerdo, y estoy orgulloso de ver que se hace realidad”, ha señalado el italiano, quien cree que el “interés común” europeo ha “prevalecido” y cree que ahora es momento de “esforzarnos por ultimar las negociaciones sobre el otro pilar del acuerdo mundial, que se centra en gravar a los mayores grupos multinacionales e incorporarlo al Derecho de la UE”.