Más presión sobre Liz Truss. Suella Braverman, hasta ahora ministra de Interior británica, ha renunciado a su cargo después de una reunión cara a cara con la primera ministra.
Noticia relacionada
Según ha avanzado en exclusiva el diario ‘The Guardian’, la reunión fue un intento desesperado de la primera ministra para evitar la dimisión de Braverman. El principal favorito a ocupar la cartera de Interior se encuentran Grant Shapps, ex secretario de Transportes y firme partidario de Rishi Sunak en la carrera por suceder a Boris Johnson en el 10 de Downing Street.
Braverman ha publicado una carta en su cuenta de Twitter en la que señala que el motivo de su dimisión se debe a una violación de códigos ministeriales, ya que envió un documento oficial desde su correo electrónico personal "con el objetivo de recabar apoyos para la política migratoria del Gobierno". Sin embargo, en esa misma misiva, la ex ministra de Interior ha señalado que alberga "dudas acerca de la dirección de este Gobierno”.
My letter to the Prime Minister. pic.twitter.com/TaWO1PMOF2
— Suella Braverman MP (@SuellaBraverman) October 19, 2022
“No solo se han roto compromisos clave que se adquirieron con nuestros electores, sino que también tengo dudas sobre el compromiso que este Gobierno a la hora de honrar otros compromisos como la reducción de la inmigración y de las inmigraciones ilegales”, ha añadido.
Según las fuentes de ‘The Guardian’, Braverman se oponía firmemente al paquete de medidas anunciado por Jeremy Hunt, nuevo canciller de Finanzas, quien ha dado un giro de 180 grados a la política fiscal de Reino Unido tras el desastroso ‘minipresupuesto’ del exministro Kwasi Kwarteng.
El diario británico destaca que Braverman, miembro del ala más dura del partido conservador, criticó abiertamente el giro de Truss sobre el tipo impositivo máximo, sugiriendo que pensaba que la primera ministra había sido víctima de un "golpe" a principios de este mes y que ahora era el propio Hunt el que manejaba los hilos del Ejecutivo británico. Algunos diputados tories de la derecha libertaria del partido han quedado consternados por las posteriores medidas de la primera ministra para eliminar otros recortes fiscales.
La salida de Braverman se produce después de que el Ministerio del Interior haya aprobado la Ley de Orden Público (‘Public Order Bill). El texto otorga a la policía británica nuevos poderes para adoptar un enfoque más "proactivo" frente a las protestas populares e impondrá penas de hasta un año de cárcel para aquellos manifestantes que “interfieran” con infraestructuras como aeropuertos o refinerías de petróleo.
La presión sobre Truss sigue aumentando después de que la crisis del 'minipresupuesto' se cobrara la cabeza del ex ministro de Finanzas, Kwasi Kwarteng, y siguen creciendo las voces que piden la dimisión de la primera ministra británica, quien recientemene ha pedido públicamente perdón “por los errores” en una entrevista concedida a la ‘BBC’, donde reconoció que el polémico ‘minipresupuesto’ fue “demasiado lejos y demasiado rápido” y que habría sido “irresponsable no cambiar de rumbo”.
“La eliminación de grandes partes de su manifiesto político sugiere que ella está en el poder sólo de nombre. No nos sorprendería que la política del Reino Unido se volviera ruidosa en los próximos días a medida que el gobierno de Truss se desmorona”, explican desde Berenberg, al tiempo que destacan que “ya hemos pasado por esto con anteriores primeros ministros”.
“Una vez que comienzan las dimisiones y las cuestiones de confianza llegan al comité central del partido, suele ser cuestión de tiempo que el primer ministro dimita”, añaden, “Probablemente, a la hora de elegir un sustituto, los conservadores intentarán buscar a alguien que cuente con la confianza de los mercados, es decir, el excanciller Rishi Sunak, que perdió frente a Truss en la reciente carrera por el liderazgo, o al propio Hunt, cuya figura parece estar creciendo tras su reciente actuación”.
