- La popularidad del candidato centrista se resiente pocos días después de ganar la primera vuelta de los comicios galos
- Los principales dirigentes políticos han pedido el voto para Macron con el objetivo de frenar a la ultraderecha
Marine Le Pen pisa el acelerador. Cuando apenas han transcurrido cinco días de campaña de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en Francia, la candidata del Frente Nacional avanza en la mayoría de encuestas contra su rival, y favorito, Emmanuel Macron. La popularidad del candidato de la plataforma ¡En Marcha! ha caído desde su victoria en la primera vuelta, al igual que la intención de voto, a pesar de que ha recibido los apoyos de prácticamente todos los partidos perdedores el 23 de abril.
El panorama recuerda inevitablemente al de las elecciones de EEUU, cuando el candidato menos favorito en los sondeos, Donald Trump, se acabó imponiendo en las urnas a su rival, Hillary Clinton. También entonces el republicano protagonizó una subida en los sondeos a poco más de una semana de las elecciones. Pero la distancia que separa a Macron y Le Pen sigue siendo mucho mayor de la que mantenían Clinton y Trump.
El socio-liberal mantiene una ventaja sobre Le pen por siete puntos, pero el retroceso que ha experimentado su popularidad e imagen disparan todas las alarmas. En cuestión de dos semanas, las encuestas muestran que Macron ha perdido entre cuatro y cinco puntos, los mismos que ha sumado Le Pen. Aún así, el centrista sigue siendo el más popular, con un 40%-41%, mientras que la líder de la ultra-derecha cuenta con un 33%-34% de popularidad.
La candidata del Frente Nacional ha llegado a avanzar cinco puntos en algunos sondeos
Las intenciones de voto favorables a Macron también han sufrido una caída similar. Medios como 'Paris Match' o 'Les Echos' muestran que Macron va en retroceso y ha cedido aproximadamente medio punto frente a Le Pen, aunque las intenciones de voto se mantienen alrededor de la proporción 60 - 40 favorables al representante de ¡En Marcha!.
LOS ESFUERZOS DE LE PEN Y EL APOYO A MACRON
La candidata del Frente Nacional ha dado varios pasos para contribuir a la mejora de su popularidad y convencer al electorado indeciso, en su mayor parte republicano. El primer gesto relevante ocurrió el martes cuando anunció dejar la presidencia de su partido. Así, dejará aparcado temporalmente el cargo para tratar de presentarse e la segunda vuelta electoral como "presidenta de todos los franceses" y ha revelado que ya está "en contacto" con cargos electos de Los Republicanos para tratar de ganarse su apoyo.
Le Pen ya ha hecho historia con el segundo puesto en la primera vuelta electoral del 23 de abril, por lo que el 7 de mayo volverá a enfrentarse al liberal Emmanuel Macron, 'a priori' favorito. Pero desde que Marine Le Pen tomó las riendas de la formación que fundó su padre Jean-Marie en 1972, los resultados electorales no han hecho sino mejorar, con lo que la candidata de la extrema derecha peleará hasta el final. Después del histórico primer puesto en las elecciones europeas de 2015, la formación siguió cosechando buenos resultados que la segunda posición de su líder en las presidenciales ha venido a superar.
Los 7,6 millones de votos cosechados por Marine Le Pen suponen un récord, pero al partido ultraderechista le perjudica especialmente el sistema a dos vueltas imperante en Francia. Tanto en las presidenciales, como en las legislativas, suele imperar el llamado "frente nacional" que conforman las fuerzas socialistas y de centro-derecha y que impone un "cordón sanitario" apoyando a cualquiera que sea el candidato que debe enfrentarse al del Frente Nacional.
De hecho, los principales dirigentes políticos han pedido el voto para Macron para frenar a la ultraderecha. El mismo presidente de la república François Hollande ha llamado a los franceses a tomar conciencia de lo que supone que una dirigente ultraderechista como Marine Le Pen haya logrado pasar a esta definitiva ronda. El favorito, Emmanuel Macron, también ha avisado de que “no hay nada ganado” y llama a un "despertar colectivo" frente a Le Pen. "Nada está hecho" para el 7 de mayo, ha subrayado Hollande, en un llamamiento a la movilización, según 'Le Monde'. El actual presidente ha pedido públicamente el voto para Macron.