EEUU ha alertado de una "invasión inminente" de Ucrania por parte de las tropas rusas. Según ha publicado 'CNBC' este jueves, el Secretario de Estado Antony Blinken se ha dirigido al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas con el objetivo de "transmitir la gravedad de la situación", según ha adelantado la embajadora de EEUU ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield.
En su declaración, Blinken ha urgido al Kremlin a que no recurra a la guerra y lo demuestre. "El gobierno ruso debe anunciar hoy que Rusia no invadirá Ucrania (...), decirlo claramente y después, demostrarlo retirando sus soldados, sus tanques, sus aviones a los cuarteles y hangares y enviando a sus diplomáticos a la mesa de negociación", ha demandado Blinken.
Asimismo, el Secretario de Estado ha propuesto al ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, una reunión que podría tener lugar "la semana próxima".
La reunión de Blinken ante las Naciones Unidas llega en un momento "crucial" en el enfrentamiento entre Rusia y Ucrania, ha destacado Thomas-Greenfield. Se espera que el secretario de Estado señale el "compromiso con la diplomacia" por parte de EEUU con el objetivo de "ofrecer y enfatizar el camino hacia la desescalada" y "dejar claro al mundo que estamos haciendo todo lo que podemos para evitar una guerra", ha añadido Thomas-Greenfield.
El viaje se produce en un momento en que Ucrania ha acusado a Rusia de atacar un pueblo cercano a la frontera. El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha asegurado que "ha empezado el bombardeo en algunas partes de la frontera" del este de Ucrania, pero manifiesta que los países de la UE no aprobarán las sanciones contra Rusia hasta que "el nivel de intensidad de la agresión lo requiera".
Además, Borrell ha declarado que la UE ha "tenido noticias sobre una retirada de tropas (rusas), pero no hay evidencia de eso" tras una reunión de los jefes de Estado y de Gobierno de la UE para tratar la tensión en torno a Ucrania, en la que no se ha adoptado ninguna decisión. El Kremlin ha negado que el extraordinario despliegue de tropas rusas dotadas de equipos militares avanzados a lo largo de las fronteras de Ucrania esté preparando una invasión.
El presidente estadounidense Joe Biden anunció esta semana que EEUU y sus aliados están preparados para defender a los miembros de la OTAN a medida que se intensifica la crisis en la frontera de Ucrania con Rusia. "Estados Unidos defenderá cada centímetro del territorio de la OTAN con toda la fuerza del poderío estadounidense. Un ataque contra un país de la OTAN es un ataque contra todos nosotros", dijo Biden, añadiendo que los aliados de Washington estaban preparados para imponer poderosas sanciones que "socavarán la capacidad de Rusia para competir económica y estratégicamente".
Si la diplomacia no prevalece, según Biden, las consecuencias podrían ser dolorosas, y no sólo para Rusia. "El coste humano para Ucrania será inmenso, así como el coste estratégico para Rusia", ha apuntado, ya que el país "se encontrará con una abrumadora condena internacional", por lo que Biden ha apuntado que una invasión de Ucrania será "una herida autoinfligida".
