Tras unas horas de tranquilidad, el volcán de La Palma vuelve a registrar desde este lunes una gran columna de cenizas, además de varias explosiones esporádicas, como recoge 'Efe', las cuales han tenido una duración de unos cinco minutos y se han podido escuchar a kilómetros de distancia. La erupción ha aumentado su intensidad durante la noche y un nuevo río de lava avanza hacia el mar.
Este lunes por la tarde, la lava avanzaba hacia la zona de Tazacorte, al lado del litoral de Los Llanos, por lo que se ordenó el confinamiento en sus casas de más de 300 vecinos de la zona, ya que se pronostica que el contacto de la lava con el agua emitirá gases tóxicos.
El Consejo de Ministros aprobará este martes la primera fase de ayudas para reconstruir la isla de La Palma y también impulsará un paquete de medidas inmediatas.
Tras la noche pasada, en la que el volcán volvió a generar fuertes explosiones, un nuevo río de lava desciende por el camino abierto a una velocidad cada vez mayor. De acuerdo a las autoridades insulares, la lava se encuentra a un kilómetro del mar en línea recta. Es por esto que, aunque no se sepa el momento exacto en el que la lava llegará al mar, se mantiene el confinamiento en sus casas de las personas más cercanas a la zona.
