La aventura de Elon Musk al frente de X, la red social anteriormente conocida como Twitter, ha saldado su primer año con una pérdida del valor de la compañía superior al 50%, ya que las unidades de acciones restringidas otorgadas a los empleados valoran a la empresa en 19.000 millones de dólares, según un documento interno al que ha tenido acceso 'The Washington Post'.
Esta valoración implica un descenso del 55% desde los 44.000 millones de dólares que el magnate pagó el año pasado, que se traducen en 54,20 dólares por acción en efectivo. Durante este tiempo, Musk no solo ha cambiado el nombre de la red social, sino que ha acometido cambios de calado en aspectos como la plantilla o las opciones de suscripción bajo pago.
Durante este tiempo, más del 80% de los 7.500 empleados con los que contaba la firma han renunciado o han sido despedidos, mientras que los ingresos por publicidad, una de las principales fuentes de financiación de la firma, se han visto reducidos en cerca de un 60%.
Además, según una estimación de 'Bloomberg', la firma debe alrededor de 1.200 millones de dólares en pagos de intereses sobre su deuda, que se incrementó en 13.000 millones de dólares tras la compra de Musk.
El propio dueño de la empresa reconoció en un correo que remitió a sus empleados en marzo de este año que el valor de la firma rondaba los 20.000 millones de dólares, y se refirió a la compañía como una "start-up inversa".
Sin embargo, Musk sigue confiando en el potencial de la red social y de los cambios que busca implementar para incrementar su alcance, como afirmó en uno de los últimos eventos que la compañía celebró con sus trabajadores.
"Estamos transformando rápidamente la empresa de lo que era, Twitter 1.0, a la aplicación de todo con una aplicación de funciones todo incluido donde básicamente puedes hacer lo que quieras en nuestro sistema", destacó Musk.