Volkswagen está estudiando prescindir de unos 300 trabajadores de la planta de Zwickau, en Alemania, ante la caída en la demanda de vehículos eléctricos.
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Según ha informado la agencia de noticias 'dpa', el recorte de plantilla se llevará a cabo mediante la no renovación de contratos de duración determinada a finales de octubre.
En la planta de Zwickau, la fábrica de vehículos eléctricos más grande del grupo en Europa, de un total de unos 10.700 empleados, más de 2.000 tienen contratos de duración determinada.
En 2018, Volkswagen anunció que invertiría 1.200 millones de euros en convertir la planta en producción de vehículos eléctricos, comprometiéndose a mantener la fuerza laboral pese a que la fabricación de este tipo de coches requiere menos mano de obra.
Sin embargo, sobre la demanda de su flota de vehículos eléctricos pesa ahora los mayores costes de energía, así como el leve crecimiento económico y la competencia en este mercado.
